POKER FACE. Órdago a la chica

 

Supongo no seré la única y, es más, creo ya lo he mencionado alguna vez, pero siento auténtica debilidad por esos títulos, que aún sin haber visto la película e independientemente de su calidad, de entrada dan para el chiste malo (como aquellos que incluyen la palabra infinito....parece que de entrada se va a hacer larga). "Póker face" se presta perfectamente a ello, haciéndonos pensar si está cara es la que exhiben sus creadores al abordar el proyecto o es la que se le puede quedar al espectador tras haberla visto. Veamos.

Escrita, dirigida y protagonizada por Russell Crowe "Póker face" es una de esas películas de arranque otoñal y cierto toque hagiográfico que nos presenta la historia de un millonario amante de los juegos de cartas que, ante un revés en su existencia, decide celebrar una reunión con sus amigos de la adolescencia. Con una cuidadísima fotografía la cinta se recrea en sus escenarios a la par que intenta moverse en dos niveles diferentes. Por un lado un drama sobre la fugacidad de la vida y la importancia del legado personal. Por otro una cinta de acción de esas de atraco perfecto mucho más intrascendente. Sin decidirse en ningún momento por una de las dos la cinta pivota entre una trama cerrada de esas en las que comienzo y final casan perfectamente y una multitud de giros inesperados, revelaciones sorprendentes y algún deus ex machina que llega para rematar la faena, creando un conjunto tan disonante como irregular.

Aunque hay que reconocer buen ritmo en la parte de acción y se agradece la brevedad de la película (apenas hora y media) hay que reconocer gran parte de sus elementos parecen metidos con calzador (el suero de la verdad, esa muerte destinada solo a probar la maldad de los ladrones) y deja un considerable número de lagunas (la poca importancia que dan los cacos al sistema de seguridad aparte del portón de acceso). "Póker face" se antoja así una cinta forzada en demasía, divertida a ratos, excesiva en otros. Una obra a mayor gloria de los fans del doble ganador del Oscar, que demuestra ha hecho lo que realmente le ha apetecido, que, a ojos de aquellos que no se cuenten entre sus admiradores, puede hacerles preguntarse si hubiese ganado más con un enfoque más mundano y alocado. La respuesta, como la carta que nunca sale cuando intentamos lograr una escalera, seguirá oculta por el momento.

"Póker face" llega a los cines el 4 de enero