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martes, 30 de abril de 2019

MAR AFUERA

Resulta difícil traducir el título de una película cuando este consiste en una frase hecha, refrán o similar haciendo que ocurran casos como que Some like it hot acabe transformándose en Con faldas y a lo loco o similares. A esta regla está a punto de sumarse Como pez fuera del agua, un título que se ajusta sin duda como anillo al dedo al argumento de la comedia italiana Come un gatto in Tangenziale ...solo que esta frase, de uso común en su lengua de origen, significa que hay cosas que duran muy, muy poco.
Como pez fuera del agua auna dos tópicos de la comedia. Por un lado el de un padre sufridor que descubre como su niña, de apenas 13 años, se ha enamorado perdidamente de un chico al que apenas concoce y que parece muy distinto a ella. Por otro, y a raíz de este noviazgo, el choque entre ricos (léase como "refinados) y pobres (léase como "maleducados"... al menos bajo este prisma que en la comedia ha cambiado muy poquito desde la época del cine mudo). El punto de inflexión es que este padre divorciado, que vive en la parte rica de Roma y tiene una posición privilegiada como asesor descubre que la madre del novio de su querida Agnese, una mujer que vive en la periferia, con marido en la cárcel, el cuerpo lleno de tatuajes y un trabajo malpagado en el comedor de una residencia de ancianos piensa recíprocamente lo mismo de su hija: que no es la adecuada para su Alessio, y que tarde o temprano le destrozará el corazón.
 Una historia que nos deja una sensación de déjà vu por cada uno de sus poros, con persecuciones alocadas (esa vigulancia del autobús nada más conocer al chico), tópicos étnicos (el  vecino que se pasa con la cúrcuma) y choque de clases pero que se mantiene gracias al carisma y la buena química de la pareja protagonista, Paola Cortellesi y Antonio Albanese, que ya coincidieron bajo la batuta de Riccardo Milani, también director de esta cinta en Mamma o Papa?, noche y día en muchas cosas pero no en cuanto a la preocupación por dos hijos a los que intentan arrastrar continuamente a su propio terreno. 
Como pez fuera del agua tiene muchos detalles divertidos (como esas dos gemelas con nombres de heroínas de Dallas empeñadas en justificar su cleptomanía) pero queriendo mantenerse fuera de la comicidad exagerada, con alguna excepción como la reacción de la madre de Agnese al conocer a sus quizá futuros consuegros, no logra alcanzar esa carcajada a mandíbula batiente que si consigue algún reciente éxito de la comedia italiana como La hora del cambio o Un italiano en Noruega. Un final poco catárquico con moraleja descafeinada (que aquí por supuesto no desvelaremos), algún elemento repetitivo (esa casi bsesión en presentar la labor de los traductores en el comité europeo...ni genera chiste ni presenta personajes de relevancia alguna, o el rol del mecánico de coches) y un argumento que no acaba de dar el do de pecho lastran una historia que, si bien nos resulta conocida, podría haber dado mucho más juego, aunque no se puede negar gana por corta duración, como un entretenimiento ligero para los amantes de la comedia italiana.
Como pez fuera del agua llega a las pantallas españolas el 25 de mayo

viernes, 26 de abril de 2019

BAILANDO CON OSOS

Resulta curioso cuando el frío llega realmente del frío. Me explicaré. A pesar del boom de los thrillers nórdicos y que las grandes películas sobre supervivencia en la nieve se ambientan en continentes como América del sur o Asia el grueso de nuestra versión de estos subgéneros nos llega de Hollywood. Ártico es la respuesta islandesa.
Proveniente de una cinematografía que por estos lares hemos conocido en cantidad mínima y sobre todo en forma de drama, pero con cintas tan interesantes como Corazón gigante, Ártico supone una sorpresa con una historia de supervivencia Pura y dura.
Protagonizada por un actor de la proyección internacional de Mads Mikkelsen, un intérprete de rostro inconfundible pero al que a más de uno le cuesta dar nombre, a pesar de su aparición en blockbusters como Rogue One o la serie Hannibal, la película tiene en su labor su mejor baza. Un papel parco en palabras pero al que Mikkelsen sabe dar toda la carga emocional asi como regalarnos un gran trabajo físico, haciendo que el espectador empatice casi inmediatamente con un personaje cuyo pasado desconocemos (podemos adivinarlo por algún detalle...no encontraremos ningún diálogo que nos saque de dudas) y cuyo futuro se desvela lleno de peligros, sorprendiendo en muchas ocasiones tanto a personaje como a espectador.
Frente a él la inmensidad del ártico que da título a la cinta. Un entorno tan hermoso como hostil. Rodado con elegancia el paisaje se convierte en un personaje más, una némesis en toda regla que puede infundir tanto esperanza como, de pronto, tornarse casi mortal haciendo que durante la práctica totalidad del metraje no decaiga el suspense.
Ártico es una película de premisa simple pero que agarra el ánimo del espectador para no soltarlo. Una respuesta aparentemente pequeña a ese Hollywood que nos ha traído películas como ¡Viven! o Everest, que quizás tengan más medios y repartos corales pero que no logran que una película como está decrezca en intensidad.
Ártico llega a las pantallas españolas el 31 de mayo.

jueves, 25 de abril de 2019

MIRA QUIEN BALBUCEA

Casi 900.000 espectadores en Francia y siete nominaciones a los premios César, incluyendo mejor película es la carta de presentación de En buenas manos. Unas acreditaciones que sorprenden tratándose de una película sobre un tema que podría resultar tan espinoso como es la adopción pero que aquí sorprende por su enfoque.
En buenas manos empieza por el final: una mujer atónita recibe la noticia por la que lleva mucho tiempo luchando, la confirmación de la adopción de un niño de apenas un par de meses. Aun conociendo el feliz (aunque no definitivo) desenlace de entrada En buenas manos nos va a llevar por múltiples caminos. Poco importan las circustancias que han llevado a la madre biológica a dar en adopción a un recién nacido, o las razones de que esta otra mujer, futura madre adoptiva, haya roto con su pareja pero aun así decida seguir luchando por un hijo. Como afirma uno de los diálogos de la cinta este es un cruce de historias, pero no pasadas, sino presentes. Las historias de todo un grupo de profesionales para que un niño encuentre la felicidad en un nuevo hogar.
A pesar de algunos elementos tan llamativos como ese hablar con un niño de meses como con una persona adulta para contarle a que situación se enfrenta o la importancia de los hogares de acogida previos a las adopciones definitivas En buenas manos destaca por la naturalidad de la historia que presenta pero sobre todo por el valor que otorga a todas las personas dedicadas a una labor tan difícil como la de formar nuevas familias.
Un viaje apasionante, que gana al revelar la humanidad de sus personajes gracias a los pequeños detalles (las reacciones ante el insomnio del niño, la obsesión por los dulces de una de las asistentes sociales...) y sobre todo a un gran elenco de actores que sabe transmitir con naturalidad emociones como el nerviosismo (la casi catastrótica audiodescripción de la madre la noche previa a conocer a su futuro hijo) o la emoción de la despedida. Esta es la clave de un film que no precisa ni alardes visuales, ni diálogos chispeantes ni sorpresas oscuras. Una historia en la que la única clave es la emoción ante ese anhelo vital que es tener un hijo, y que sabe presentar con una corrección y respeto absolutos frente a toda esa cascada de papeleos y pase que exige el poder sumar a una familia, más grande o más pequeña, un nuevo miembro de otra sangre.
En buenas manos llega a los cines españoles el 1 de mayo.

miércoles, 24 de abril de 2019

EL PLUMERO DEL INFINITO

A falta de día y poco para el estreno de Vengadores: Endgame es hora de analizar la figura de su némesis...


martes, 23 de abril de 2019

UNA MUJER GLORIOSA

El cine aparte de entretener hacer pensar, y no solo en torno a las grandes preguntas en torno al sentido de la vista, el universo y todo lo demás. Viendo Gloria Bell, la última película del director de la oscarizada Una mujer fantástica, me he percatado que es difícil encontrar en el séptimo arte, lejos de alguna mascota animada henchida de felicidad absurda, personajes que parezcan ser realmente felices. Gloria, una abuela estupenda, a pesar de sus problemas y visicitudes amorosas da la sensación de que lo es y eso no es precisamente sencillo.
Remake de Gloria, también dirigida y escrita por Sebastián Lelio, Gloria Bell es la historia de una mujer de vuelta de todo. Divorciada desde hace años, con hijos ya mayores e incluso un nieto de corta edad Gloria es una mujer autosuficiente que encuentra la felicidad absoluta cuando baila, y para la que la música (en una selección de clásicos francamente espectacular y que, adelanto, solo puede encontrar su remate en una canción que imagino la mayoría ya adivina) es una parte fundamental de su existencia. Un personaje vital, luminoso, al que Julianne Moore sabe insuflarle auténtica alma.
En Gloria Bell no hay grandes problemas existenciales, solo circustancias fruto del natural devenir de la existencia. Nuevos amores, algún problema económico, desengaños amorosos, enfermedades que con paciencia puede que nunca evolucionen...pasos que podrían minar la vida de más de uno pero que los personajes de la cinta, y en especial su protagonista sobrellevan con algo que parece ser la clave de esta película: la naturalidad.
Y es que todo en esta historia parece fluir con la mayor serenidad posible incluso en momentos tan hirientes emocionalmente hablando como puede ser una ruptura amorosa, en torno a unos personajes ante los que uno no puede dejar de sentir cierta simpatía, ya que pudiendo ser auténticos maremotos se convierten en agradables olas entre nuestras piernas.
Gloria Bell es una película sobre la alegría de vivir, sobre el sobreponerse al día a día con la mejor cara y si es posible con un poco de ritmo. Una cinta con un ligero toque de realismo mágico (ese gato esfinge que parece acosar a nuestra protagonista), de imágenes sencillas pero que saben revelar la belleza de lo cotidiano (ese impresionante plano de la peluquería). Sencillamente una película que hace sonreir, no por ser una comedia al uso, ya que sería incluso difícil certificar en que género nos estamos moviendo, sino porque logra encender una pequeña luz cada vez que parece que avanzamos un paso hacia la oscuridad.
Gloria Bell llega a las pantallas españolas el 1 de mayo.

lunes, 22 de abril de 2019

lunes, 15 de abril de 2019

RODANDO VOY

Primero llegaron los coches, y la cosa funcionó tan bien que dió hasta para dos entregas más. Después los aviones, y aunque el éxito no llegó a tanto la secuela también se hizo realidad. Si hasta el séptimo arte en su vertiente animada ha abierto su corazoncito a un caracol de carreras de nombre Turbo...solo era cuestión de tiempo la llegada de las bicicletas con la nominada al Goya Bikes.
Coproducción hispano-chino-argentina destinada al público infantil Bikes cuenta con una premisa sencilla: una bibicleta soñadora, repartidora de correo pero aspirante a bici de carreras, que se enfrenta a los oscuros tejemanejes de la banca local para imponer el uso del motor industrial y de paso apoderarse del pueblo que moran nuestro héroe y sus amigos.
Protagonizada casi en su totalidad por bicicletas, con la excepción de un perrete- monociclo y unos infladores de ruedas que parecen estar emparentados con los ya clásicos Minions, Bikes es una película que se esfuerza por mostrar un diseño original, destacando especialmente esa ciudad formada en su mayor parte con piezas de bicicletas así como pequeños detalles tan divertidos como esa llave de la ciudad transmutada en llave Allen o las firmas de documentos en forma de huellas de neumáticos. Lamentablemente ni el diseño de algunos secundarios ni la textura y animación de las escenas están a la altura. No se trata de que todo el cine de animación tenga que parecer fruto de Pixar pero el acabado desmerece en una producción con otros aspectos tan cuidados como el doblaje (con Anabel Alonso o Carlos Parte como nombres más conocidos).
Bikes es una película con un hermoso mensaje, defensora de la ecología y el esfuerzo personal, con una sencillez que sin duda ayuda a que lo asimilen mejor los más pequeños de la casa pero pobre en otros aspectos que tal vez habrían añadido una pizquita de sal a una cinta a la que se le agradecería un poco más de chispa (que la tiene en momentos como esa parodia de videojuego, comecocos incluido en la infiltración en la refinería...). Eso sí, se agradece una propuesta así de cara a la inminente Semana Santa y ¿quién sabe? si funciona puede que en breve tengamos Patines: la película. Que seguro que la opción con drones está ya en la mesa de más de un estudio.

Bikes llega a los cines el 18 de abril.

viernes, 12 de abril de 2019

SEMANITA DE TERROR

Llega la Semana Santa...para pasarla de miedo no olvidéis que sigue en cine Cementerio de animales y el día 18, jueves santo, La llorona. Y de postre en Cineteca Matadero podéis discrutar, con ocasión de su 40 aniversario de la clásica Alien el octavo pasajero de viernes 12 a sábado 14 a las 17:30.
Mucho cuidado...os queremos ver a todos a la vuelta...

miércoles, 10 de abril de 2019

DUELO A LA LUNA

Sí juntamos las palabras western, hermanos y francés lo primero que vendrá a nuestra mente probablemente serán unos viejos conocidos del noveno arte: los Dalton. Pero además de las némesis de Lucky Luke en el imaginario del Oeste aparecieron hace más de un lustro Los hermanos Sisters, fruto de la imaginación del canadiense Patrick de Witt. Ahora de la mano de factura francesa y bajo la batuta del director Jacques Audiard, director de Un profeta y De óxido y hueso, llega su adaptación cinematográfica.
Hablar de western atípico a la hora de tratar Los hermanos Sisters sería optar por la salida más convencional. Un arranque minimalista, en el que podemos apenas distinguir una ola de disparos en una noche cerrada es la primera pista de que nos encontramos ante un micrososmos particular, un escenario que, sin renunciar al saloon o a la calle desierta presta al tiroteo de rigor, en el que se va a desarrollar la odisea de dos hermanos, cazarrecompensas de profesión, que van a ver como un trabajillo cotidiano va a tomar derroteros muy distintos de los que esperan.
Con un tándem antagónico al frente, un sensible John C. Reilly y un airado Joaquín Phoenix, que encarnan a los Sisters del título, a los que se suma otro viejo conocido del western fuera de la norma, Jake Gyllenhaal, Los hermanos Sisters parece empezar sumándose a unos tópicos a los que sin embargo van a dar la vuelta. Un oeste inclemente, feroz, en el que cualquiera puede ser un enemigo y en el que el tiempo, tanto cronológico como meterológico, puede ser una amenaza, en el que se desarrolla una trama en la que la palabra puede tener tanto peso como el arma y en el que pueden aparecer elementos tan surrealistas como esa sustancia de aura alquímica que se convierte tanto en mcguffin en la primera mitad de la cinta como en catalizador de un desenlace completamente inesperado.
Los hermanos Sisters es una película que sabe sorprender. Una trama que cuando parece encauzada da un giro que no esperamos. Desde el asesino nato al vaquero que también sabe llorar sus (contados) personajes van evolucionando con un aura nostálgica, aunque en muchos momentos dudemos si va a ser relevante de cara a un final que en muchos ocasiones queremos adivinar trágico, casi fatalista (si lo es o no dejaremos que lo descubran en los cines).
Rodada con un gran uso de la imagen, con una fotografía tan cuidada como pide el género (no veremos el valle de la muerte pero no lo necesita) y una dirección artísitica a la medida Los hermanos Sisters es una gran heredera del western clásico del otro lado del océano, con su originalidad pero respeto por su herencia, que no solo de Ford vive el cineasta, sino también de la violencia de Peckinpah. Una gran apuesta para los amantes del género del oeste pero también para aquellos a los que les gusta descubrir el otro lado de viejos conocidos.


Los hermanos Sisters llegan a los cines españoles el 10 de mayo.

martes, 9 de abril de 2019

EL CÍRCULO DE LA HUÍDA

Mía y el león blanco es una película llena de buenas intenciones. Un canto de amor a la naturaleza, una apuesta por la defensa de los animales en peligro y un mensaje de lucha hasta el final por los propios principios son las mejores bazas de una película con clarísima vocación de cine infantil.
Odisea africana de una adolescente desarraigada que encuentra su unica ancla en su amistad con Charlie, el león blanco del título, no se puede negar que la película sabe muy bien con que cartas juega: un lroncito que desde el minuto uno es para comérselo, unos entornos de postal y unos personajes cuyas motivaciones son fácilmente comprensibles. Pero también se trata de una película que opta por el salto sin red, e incorpora rápidamente elementos fantásticos a una propuesta en principio verista, dotando a nuestro héroe animal de unas características casi mesiánicas (tiembla Aslan)  y haciendo que los personajes tomen decisiones poco comprensibles de entrada, y más si llevan tanto tiempo lidiando con animales salvajes.
Nos encontramos así ante un argumento de fórmula, pero rodado más que correctamente y con un buena quimica entre actores humanos y animales (ahí está ese suricata robaescenas que da para los momentos más cómicos de la cinta) aunque sin los virtuosismos a los que podría invitar la grandeza del paisaje.
Realismos aparte (ojo lo bien que funciona la cobertura en la sabana africana) Mía y el león blanco es una cinta iniciática clásica, con revelaciones del pasado y toques de drama adolescente. Una película que puede encandilar a los espectadores más jóvenes con el encanto de sus animales y sus conflictos generacionales pero que al cinéfilo que aspira a encontrar algo más puede que le parezca algo más propio de una sesión televisiva de sobremesa.
Mía y el león blanco llega a los cines el 12 de abril.

lunes, 8 de abril de 2019

TIERRA CON CINE

He visto muchas películas sobre directores de cine, reales y ficticios. Cineastas que no encuentran la inspiración, creadores que se vuelven locos o incluso que se enfrentan al apocalipsis zombie. Pero también he de confesar que ahora, en frío, no recuerdo haber visto ninguna de animación fuera de los populares cortos de Looney Tunes o algún secundario de películas como la reciente (y muy recomendable) Teen Titans Go! La película . Al menos hasta ahora con la llegada de Buñuel en el laberinto de las tortugas.
Basada en el cómic de igual título, obra del ilustrador cacereño Fermín Solís, su poético título hace referencia al peculiar aspecto de las casas de las Hurdes, comarca extremeña en la que el ilustre aragonés filmó el documental Las Hurdes, tierra sin pan. Frenta a otras apariciones de Buñuel en el cine con tintes más fantásticos como Buñuel y la mesa del rey Salomón esta película, sin renunciar a algún guiño surrealista en forma de sueño, o casi mejor debería decir pesadilla, se centra en el rodaje de esta clásica y conrtrovertida obra, con la ayuda de su amigo reconvertido en productor Ramón Acín y dos colaboradores franceses.
Buñuel en el laberinto de las tortugas desde sus primeros minutos deja muy claro que su protagonista es un personaje lleno de matices. Comprometido con el Surrealismo entendido a su manera, pero atormentado por la sombra de su amigo Dalí, fuerte hasta rozar la agresividad pero lleno de una fragilidad onírica y un humanismo que le cuesta revelar, entusiasta y creador pero también un manipulador capaz más de "crear" un documental que de rodarlo...el Buñuel de esta película es todo un hombre lleno de contradicciones que sabe moverse entre la tradición y la iconoclasia. Un Buñuel hacia el que es imposible no sentir cierta simpatía desde su primera aparición vestido de monja y que se va a convertir en todo un Ulises envuelto en una particular Odisea que puede poner a prueba su amistad con Acín como su propia cordura.
Para aquellos que conozcan la obra en la que se basa encontrarán en esta película una buena adaptación de los diseños originales del cómic, aunque con diferencias más que notables así como un inteligente uso del color inexistente en el tebeo original (aunque con ocasión de este estreno llega una nueva a todo color). Un trabajo hermoso, aunque palidece ante una animación de movimientos ligeramente menos brillante pero con el buen acierto de intercalar escenas del documental original, estableciendo un paralelismo entre esta recreación y la tercera cinta de Luis Buñuel.
Buñuel en el laberinto de las tortugas es una maravillosa rareza en el panorama de la animación y uno de las pocas contribuciones del género al Surrealismo en su categoría de movimiento (auque ahí está ese corto Destino, parte de la cinta Fantasía 2000 que se hizo realidad tras décadas como proyecto perdido del propio Dalí). Una película que escapa del concepto de manido concepto de "dibujos animados para niños" y nos regala una cinta tan interesante como entretenida, no carente de polémica (ahí está el tratamiento de Buñuel a las especies autóctonas para aumentar el dramatismo de su obra) y de una excelente documentación. Muy recomendable para amantes de la historia del cine Buñuel en el laberinto de las tortugas es una película que no deja indiferente, con sus imágenes poderosas y la humanidad de sus personajes, logrando avivar las ganas de enfrentarnos nuevamente a la poderosa miseria de Las hurdes. Tierra sin pan y a la fuerza de la obra de uno de los directores españoles más emblemáticos.

Buñuel en el laberinto de las tortugas llega a los cines el 26 de abril.

miércoles, 3 de abril de 2019

TIOVIVO C. 2019

Hay niños que sueñan con ser superhéroes, astronautas o princesas pero el sueño de June, la protagonista de El parque mágico, es todavía más ambicioso: el de crear todo un parque de atracciones, y no solo con su imaginación. Este es el punto de partida de una cinta que cuenta en su carta de presentación con la presencia en su ficha de doblaje de Silvia Abril (a la que también pudimos oir en Peter Rabbit y Toy story 3) y Andreu Buenafuente (que ya probó suerte en el doblaje de cintas animadas en Donkey Xote) y una canción a cargo de David Bisbal.
En El parque mágico hay mucho del cine infantil más clásico. Muñecos que cobran vida (al menos en la imaginación de su protagonista) como en Toy story, mundos fantásticos que se autodestruyen como en La historia inteminable y un duro encontronazo con la enfermedad como en Up. Quizás esta parte sea la mejor de la película, con un montaje prácticamente carente de diálogos y evocadoras elipsis, pero una vez puesto sobre la mesa el drama de una niña que debe asumir la marcha de su madre, es cuando la película se une a los terrenos del cine más convencional, sumiendo a nuestra protagonista en toda una odisea para salvar el parque mágico de su imaginación.
Escenas que parecen únicamente concebidas para dar mayor brillo a proyecciones en 3D, numerosas persecuciones y una trama que parece centrarse casi totalmente en llevar a sus personajes del punto A al punto B restan peso así a una historia cuyo trasfondo emocional de los personajes parece augurar mucho en los primeros minutos del visionado (esa niña que tras la marcha para su tratamiento de su madre se convierte en sobreprotectora con su padre, a la par que va abandonando desilusionada los juegos que compartía con ella) pero que poco a poco va perdiendo fuerza. Es comprensible la introducción de elementos que enganchen a los más pequeños como la prueba de la montaña rusa casera con catastróficos resultados pero no tanto así que estos se adueñen casi por completo de la función, restando profundidad a los propios moradores del parque mágico del título (como Boomer el oso narcoléptico o ese demiurgo con forma de chimpancé que, francamente, podría haber dado mucho más juego) y haciendo de ella una película que tiene demasiado claro que su público responde a la característica de infantil (y cuando más pequeños mejor), dejando mucho menos cancha a aquellos adultos que deseen aproximarse a esta película de animación.
Por otro lado nos encontramos ante una cinta bien animada, que sabe hacer buen uso del color y la iluminación hasta niveles deslumbrantes, con un escenario especialmente cuidado, que supera de largo el nivel de diseño de unos personajes que, aunque simpáticos, palidecen ante su propio hábitat. Un bello envoltorio visual en el que se diluye una historia que va perdiendo profundidad a medida avanza. Sin embargo esto no hace de ella una propuesta menos recomendable para los más pequeños de la casa, con una historia con la que es posible más de uno se sienta identificado y un mensaje que defiende ante todo el poder de la imaginación. Pero ello no hace por ello que tengamos menos añoranza de ese cine de animación al que nos malacostumbraron un día que podemos disfrutar igualmente niños y adultos.
El parque mágico llega a los cines españoles el 12 de abril

martes, 2 de abril de 2019

CONTRA EL IMPERIO DE LA PRECARIEDAD

Si hablamos de profesores de química y chanchullos de drogas inmediatamente solo podemos pensar en una cosa: Breaking bad. Lo dejo cuando quiera tiene muy en cuenta su referente estrella, aunque en realidad se trate de un remake de la italiana Smetto quando voglio, trocando la pastillas azules en rojas, el cáncer en paro y el drama con aroma a thriller en un buen puñado de carcajadas.
Dirigida por Carlos Therón, un habitual en la comedia tanto en la pequeña como en la gran pantalla, Lo dejo cuando quiera es puro humor gamberro. Partiendo de ese drama que no parece tener solución ni a corto ni a largo plazo que es de los licenciados que tras años de estudio se enfrentan a trabajar en algo completamente ajeno a sus conocimientos o incluso al paro mismo la película presenta un inesperado plan B en forma de tráfico de drogas (en realidad un reconstituyente no probado siquiera en animales que se les va de las manos) que va a convertir a un puñado de estudiosos incapaces de haberse corrido una juerga en sus tiempos universitarios en los auténticos reyes de los garitos de moda.
Personajes que parecen desconectados de todo, alguno entrañablemente infantil y otros rozando niveles casi surrealistas, pero dispuestos a recuperar lo que se les ha escapado durante años, desde el irse de fiesta (aunque me cuesta creerlo en el caso del personaje de Ernesto Sevilla) al amor a punto de perderse para siempre, consiguen rápidamente meternos en una historia que no renuncia ni a los clichés ni al humor más grueso (me quedo con el unicornio de la "pata rota"...indescriptible), pero que logra mantener el interés del espectador durante todo el metraje, y eso que hay alguna escena que se dilata en exceso, como la del atropello de uno de los personajes cuya identidad dejaremos descubran por su cuenta.
Si hay algo que hace de esta una de esas comedias que, sin revolucionar el género, sí consigue hacernos pasar un buen rato a pesar de los peros (que los hay), es su buen sentido del ritmo, moviéndose entre equívocos con toques de slapstick y algunas réplicas realmente ingeniosas (ese Disneylandia de la Vaguada), así como regalándonos un elenco con el que no cuesta conectar, incluso con aquellos que parecen estar de vuelta de todo.
Sabemos que en el fondo estamos ante el cine de estafadores y criminales de toda la vida, de esos a los que en mucha ocasiones les falta picardía, solo que llevándolos a un mundo de la noche que prácticamente engulle a sus protagonistas. No importa que el comisario sea en esta ocasión una mujer de rompe y rasga, la banda sonora esté llena de temas internacionales y la estampita de toda la vida sea ahora una pastillita roja...nada cambia, pero sigue funcionando. Y muchas veces cuando uno acude al cine a pasar un rato a carcajada limpia es lo único que importa.
Lo dejo cuando quiera llega a las pantallas el 12 de abril

lunes, 1 de abril de 2019

CENIZAS ENAMORADAS

Un coloso. Un marginado. A veces un monstruo. En ocasiones todo eso, y más. Ron Perlman probablemente nunca será un astro de Hollywood en el sentido clásico, pero su presencia única le convierte en un intérprete inconfundible. Y un poco de todo lo anterior hay en Asher.
Drama crepuscular sobre un asesino con el pie en la tumba por partida doble Asher centra su historia en un romance entre este y una profesora de danza encarnada por Famke Janssen.
La película sabe abrir con una presentación de esas que enganchan, al mostrarnos las rutinas de un asesino tan metódico como ingenioso ( impagable ese sistema de hacer salir al objetivo activando la alarma antiincendios) atormentado por una soledad fruto de sus años de trabajo como sicario. Pero de ella va a sacarle una relación que es pura bella y la bestia.
Más entrañable que salvaje, añadiendo al cóctel esa madre demente con tendencias suicidas que atormenta al personaje de Janssen y parece invitar a Asher a hacer entrar su oficio en un vínculo que puede redimirle, el espectador se enfrenta a una historia de personajes rotos, con miedo a abrirse a otros seres humanos pero que tampoco quieren renunciar al contacto.
Rodada con mimo, con unos espectaculares contrastes y juegos de sombra entre los que destaca el primer asesinato y unos diálogos de réplica clásica Asher es una película que en ocasiones parece de otra época, hecha con absoluto respeto con el género y que, sin renunciar a los tópicos los emplea con inteligencia. Una cinta sobre seres que jamás podrán renunciar a lo que son, pero para los que todavia hay esperanza.

Asher llega a las pantallas españolas el 5 de abril.