Translate

lunes, 7 de marzo de 2016

SYFYANDO 2016 (2)

Con algunos espectadores ya acorralados por la falta de sueño (sumando llegada tarde a casa con madrugón...pero claro, amar el cine a veces es sufrir...y eso sin contar cuando la misma película ya lo hace) había llegado ya el momento: el primer día de la 13ª Muestra SyFy de cine fantástico propiamente dicha. La sesión empezó con un ejemplar de un género que ultimamete anda un pelínmermado en la susodicha (no así algunos de sus híbridos), el terror y llegando de las frías tierras noruegas...era la hora de Villmark asylum.
 Pretendida continuación (al parecer aparte del título poco o nada tiene que ver con ella) de una cinta noruega de gran éxito en su tierra natal y que confesaré, no he visto, la película auna todos los tópicos sobre manicomios y hospitales abandonados con la excusa de un grupo de trabajadores que acude a inspeccionar las instalaciones antes de su derribo...si bien se podía haber añadido algo de "chicha" a través de una misteriosa trama en la que juegan un buen papel los experimentos médicos y una relativa ambigüedad en torno a la verdadera amenaza que acecha a los protagonistas el resultado queda más entancado que el sótano del sanatorio en el que se ambienta el film...más suerte si hay tercera parte.
 La tarde continuó con una película que, con su premisa parecía recordarnos ligeramente a otra de la que pudimos disfrutar el pasado año, Burying the ex de Joe Dante. pero con la que aparte de ciertos matices tenía más bien poco que ver: Nina forever.
Histora de amor un poco fou entre un chico, su nueva novia y la antigua, una difunta que se aparece bañada en sangre cada vez que estos intentan consumar su amor la película es un curioso híbrido entre comedia indie y terror, pero sin llegar a explotar al máximo las posibilidades de cualquiera de estos dos géneros. Con alguna buena idea que sin embargo luego repite en demasía (el asunto de la limpieza de las sábanas) y concesiones al drama que parecen sacarnos del clima de la película (la reacción de los padres de la novia muerta) la película se deja avasallar por una ligera falta de ritmo, si bien hay más de un elemento para hacer de ella un producto potente.
Y a la conclusión, un poco más tardía de lo esperado por (involuntarios claro) fallos técnicos, llegaba una de las cintas más esperadas, que ha tardado en llegar a la pantalla, al igual que pasó con la muy recomendable La cabaña en el bosque (y que también pudimos disfrutar en la muestra hace unos añtos) en su día. Hablamos de The green inferno.
 Retorno al malsano infierno verde, como su nombre indica, que conocimos en los 80, la cinta de Eli Roth aparca tejemamejes de malvados periodistas y found footages para contarnos la historia de unos activistas con más buena voluntad que cerebro que acaban enfrentándose a todo un poblado caníbal tras pegársela con un avión en la más bella tradición de Perdidos. Excesiva en ocasiones, con ramalazos de gore (no se echan de menos los desmembramientos que eran el sello del gran final de la original...y además ningún animal no humano es herido en esta ocasión) y un final con sorpresitas (no se vayan en cuanto empiecen los títulos de crédito por favor) la película es una divertida cinta de caníbales que contentará a los fans del género aunque cueste menos ponerse al lado de los alocados caníbles que del de unos universitarios que, enfrentándose a eso que solo han oído en sus clases, siguen haciendo cosas de juzgado de guardia (el episodio de la flauta).
Con nocturnidad llegó la única película de este año que contó con la presencia de su director, José Skaf, y parte de su reparto (entre ellos una Silvia Abril que, a pesar de intervenir con un papel que es cualquier cosa menos cómico, supo hacer reir a los asistentes): la española Vulcania.
 Curiosa distopía sobre un pueblecito dedicado a la industria metalúrgica cuyos oscuros secretos marcan la vida de sus habitantes la película goza de un buen diseño de producción, un reparto lleno de nombres conocidos y un punto de partida (un inesperado derrumbamiento) de esos que agarran la atención del espectador, pero comienza a perder fuerza a medida que avanza su metraje, para llegar un climax más tópico de lo que habríamos podido presentir en un principio, con unos personajes con más blancos y negros que grises.
Y la conclusión llegó ya en forma de sesión de madrugada: Parasyte.
 Basada en el manga homónimo esta cinta en torno a unos alienígenas con malas pulgas que intentan hacerse con el planeta tras poseer varios cuerpos humanos la película tiene un impresionante arranque, buen sentido del humor y personajes carismáticos (como la profesora que intenta alcanzar un término medio en la conquista o el apéndice extraterrestre del protagonista) pero una vez puesta la baraja sobre la mesa acaba volviéndose una historia convencional de esas en las que el ente más fuerte es justo el que no se adapta a las normas (y en la que no faltará la típica historia de amor). Con escenas muy divertidas y elementos de acción bien coreografiadas (genial la idea del arco) la cinta es una entretenida historia que queda abierta, dejándonos con muchas ganas de disfrutar de la secuela (mi voto para que la proyecten el próximo año a la misma hora)
Y así, con parásitos alienígenas, concluyó la primera jornada propiamente dicha...quedban poco más de doce horas para la siguiente...de la que hablaremos en breve.

No hay comentarios:

Publicar un comentario