EL PRIMADO DE POLONIA. Las audacias del pescador.

 

Durante décadas el cine religioso se ha movido entre el peplum y la hagiografía pura y dura, dejando contados huecos para la controversia de episodios reales o inspirados en estos como "Amen" o "Gracias a Dios", o, si nos movemos en terrenos más pretéritos, "Silencio" o "La misión". Cercana en forma aunque quizás no en espíritu se presenta " El primado de Polonia", una cinta que nos acerca a la situación de la iglesia en la patria del que sería Juan Pablo II entre el final de la II Guerra Mundial y el ascenso de este al trono de San Pedro.

Pero aunque es imposible eludir la figura del Papa polaco (que aparecerá en tres momentos a lo largo de la película y de ellas dos de modo casi anecdótico) su protagonista no es este sino el obispo Stefan Wyszynski, una figura capital que intentó recuperar la libertad y dignidad de su iglesia frente a una cúpula comunista que le mantenia bajo vigilancia e intentaba amoldarlo a las directrices del partido. Una trama que aboga por un conflicto que pasa del diálogo a la agresividad y que supone de entrada una atractiva premisa que presenta un episodio histórico poco tratado en el cine. Pero a pesar de un competente protagonista que sabe aportar dignidad a un personaje más rico en luces que sombras y mas de un secundario carismático el film flaquea al abusar de algún diálogo poco sutil (la escena de la trinchera), mutar a medida que avanza el metraje al dirigente del partido en un villano digno de una serie infantil (cabreo y sonrisa inquietante incluidos) e incluir algún elemento que se sale de las leyes de la física (la manifestación), sin olvidar una banda sonora que no parece decidirse por un estilo concreto sacándonos en más de una ocasión del clima de la historia .

Aún así "El primado de Polonia" es una película que a pesar de su duración, sabe mantener el ritmo, sabiendo dosificar el drama con los toques de humor (impagable ese pobre espía, condenado a pasar el día a la escucha de aquello que registran los micrófonos en casa del obispo y que la cinta nos deja con ganas de saber cual es su desenlace). Una obra con un buen diseño de producción que tal vez ganaría enteros de no diluirse en más de ocasión en un mensaje necesario, pero que abusa de unos elementos ponderativos que no necesitaría para conmover, sabiendo hacer buen uso de la elipsis en los momentos más dolorosos. Una atractiva película para aquellos interesados la historia contemporánea de la iglesia católica simplemente en el hecho religioso. Si bien lejos está de los clásicos "El primado de Polonia" sabe defender una historia que para muchos resulta una gran desconocida y que abre la tentadora puerta del querer saber más.

"El primado de Polonia" llega a los cines el 24 de mayo.