Año tras año la cartlera nos trae un buen puñado de remakes, tanto de cintas clásicas como de películas de otras nacionalidades (el récord se lo lleva por goleada por supueto Hollywood), para dejar bien amsticadito algunos materiales o bien presentarlos con un nuevo lavado de cara a nuevas generaciones. Así hace no mucho por estos lares hablábamos del nuevo Ben-Hur y en breve quizás nos visite por Monigotorium la nueva versión de Al interior (de inminente llegada a Sitges), pero por supuesto en una año en el que la cosecha de westerns está siendo particularmente buena ( Los odisos 8, Bone tomahawk...) era la hora de la ración correspondiente...hoy hablams de Los 7 magníficos.
El pacífico valle de Rose Creek está habitado principalmente por granjeros pero su mina hará que pose sus ojos sobre él Bogue, un malhechor con un gran ejército a sus órdenes dispuesto a pagar a sus habitantes una miseria para quedarse con todo el pueblo, y que tras una pequeña masacre promete volver en tres semanas con una propuesta todavía peor. Sin embargo, Emma, a la que Bogue ha convertido en viuda está resuelta a que, juntando una gran suma, contraten un grupo de pistoleros que les libere de esta amenaza. Sam Chisolm, un cazarecompensas será el primero, y a él ronto se unirán seis más dispuestos a empezar, con la ayuda del resto de Rose Creek, su particular batalla para defender sus intereses.
Remake de la cinta de 1960, ya objeto de varias secuelas e incluso de una serie de televisión (y que a su vez era una libre versión de Los siete samuráis de Kurosawa) la película nos vuelve a acercar a un oeste hostil para contarnos una historia de buenos y malos enzarzados en toda una batalla campal por sus tierras.
Con cierto aroma clásico, a la que contribuye una correcta banda sonora (seguimos echado de menos la irrepetible del original, a la que dedican sin embargo los primeros minutos de los títulos de crédito finales) y una concepción de los planos inspirada en el western clásico (más en las escenas de diálogo que en las de acción propiamente dichas) la película saca buen partido de su bien excogido y multicultural reparto, en especial de un Chris Pratt que está en su salsa en su papel de aspirante a timador con principios y que parece estar pasándolo en grnade, dejándonos alguno de los momentos más divertidos de la cinta, mientras otros como el binomio formado por Ethan Hawke, un antiguo soldado con lo que hoy llamaríamos estrés postraumático, y Byung-hum Lee, su fiel y más taciturno amigo, quedan más desaprovechados.
Sin aportar nada esencialemnte al original esta nueva versión supone un entretenido acercamiento a una historia que conocemos bien, y que sigue dándons una vistosa presentación de sus personajes (para muestra la del comanhe) para tras un breve intervalo para cerrar lazos y añadir algún matiz a los protagonistas pasar a la acción propiamente dicha, una larga secuencia que, a pesar de su esperado final, consigue mantener un buen ritmo y dar su gran momento de gloria a todos y cada uno de sus personjes así como dejarnos un buen puñado de imágenes poderosas y buen empleo de la pirotecnia.
Los 7 magníficos puede agradar más o menos a los puristas del western pero ante todo es una cinta que sabe sacar buen partido de sus materiales (alguno con más fortuna que otro, como ese viano que en comienzo se antoja casi una figura satánica pero que permanece ajeno en persona la mayor parte del metraje) y que sobre todo sabe ser entretenida, dejando ese agradable sabor de cuento de indios y vaqueros antes de irse a la cama.
Un par de horas de buen entretenimiento homenajeando a uno de los grandes clásicos Los 7 magníficos llega a las pantallas el 23 de septiembre.
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