INDIGNADISIMOS

El cine siempre ha sido sinónimo de diversión pero desde sus inicios también se ha tornado un arma intelectual y social...tal vez esto sea demasiado rimbombante para una cinta que no ha llegado con los medios de un gran blockbuster pero algo de esto sí hay en Justi&Cía.

Justi&Cía es una cinta que empieza con tintes muy grises, con una comunidad minera que ha visto como literalmente sus sueños se han derrumbado sobre ellos en forma de catástrofe con un único superviviente (por supuesto nuestro protagonista) cuya responsabilidad no reconocen "esos de arriba". Súmale una crisis horrorosa, actos sin sentido y tendrás el caldo de cultivo ideal para que un tandem de parado y yayoflauta se unan para acabar con las injusticias a su manera, desde lo más bajo, atacando a los poderosos con la única arma de su imaginación y una cámara para grabar sus confesiones. Nos encontramos ante una historia original (si bien, advertimos, su desenlace no lo será tanto) con fuerte crítica social pero sobre todo de amistad, con dos magníficos actores que saben llevarnos de la sonrisa a la lágrima, destacando un Álex Angulo que nos regala uno de sus mejores papeles en este que ha sido su film póstumo. Pero sobre todo se trata de una película que, sabiendo ser profunda en su justa medida y divertida cuando toca, de grandes hallazgos, desde el atavío de los protagonistas (cambiénme disfraces hollywoodenses tipo Le llaman Bodhi por gafas de Groucho) hasta los cortes informativos (glorioso el término "Carboneta") pasando por una serie de escenas que nos dejarán un buen recuerdo (sin destripar la escena de la gasolinera, impagable la reacción del dependiente, o cada vez que Justi hace su discurso sobre los Reyes Magos con el "regalito" correspondiente),  dejando un poso importante en un espectador que en mayor o menor medida ha sido testigo de las mismas injusticias que han puesto a nuestros héroes en este punto límite. Justi&Cía puede gustar más o menos, puede tener más o menos incongruencias (en frío cuesta creer que tarden tanto en identificar a estos "fuera de la ley") pero es una película en el momento que vivimos necesaria. Y eso es lo que importa.

El cine social no son solo dramones...una película con buen equilibrio de emociones y un impagable último trabajo del siempre estupendo Álex Angulo.