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jueves, 11 de agosto de 2016

¡A POR EL NIÑO!

Aunque vayamos de niños buenos es imposible no reconocer que hay pocos elementos tan cinematgráficos como el delito...del asesinto al robo, pasando por el chantaje y otras extorsiones es inimaginable que el cine no recurra una y otra vez a este campo. En el caso concreto del secuestro este muchas veces ha dado incluso pie a su propia dimensión de otros subgéneros (como el torture porn dentro del terror,,,),y es que sigue siendo una de las mejores escusas para mostrar una de las facetas más oscuras del ser humano, y más en el caso  de los que quizás sean las víctimas más desvalidas: los niños, con cintas como Rescate, La habitación, El fuego de la venganza, Adiós, pequeña, adiós o Un mundo perfecto ...y justo ahora nos llega una con un título que no deja lugar a dudas: Secuestro.
 Un niño herido camina solo y desorientado por la carretera. Un coche se detiene para auxiliarlo pero en el hspital nadie consigue arrancarle una palabra sobre qué le ha sucedido. Cuando por fin localizan a su madre, Patricia, descubren que el niño es sordo de nacimiento y ha perdido sus audífonos, y solo a través de ella el chico les cuenta que fue secuestrado en la puerta de su colegio y que milagrosamente logró escapar, así como identifica rápidamente a un sospechoso. Sin embargo no hay prubas determinantes y este es puesto en libertad, y a partir de ese momento Patricia, una abogada de éxito con muchos recursos, temerá tras una serie de extraños sucesos, que este vuelva a intentar llevárselo, por lo que empieza a madurar la idea de tomar medidas extremas.
Ambicioso thriller con un arranque de esos que enganchan, sin faltar elementeo misteriosos e incluso conspiranoicos, Secuestro es una cinta que pretende jugar con un espectador ávido de sorpresas, sin escatimar en detalles.
Así nos encontramos con una adictiva primera parte en la que nos presentarán a sus protagonistas, unos personajes llenos de sombras, en ocasiones motivadas por buenas intenciones, en otras por motivaciones más oscuras, que se van a convertir sinultáneamente en reinas y peones de una partida en la que todos sufrirán un jaque, hasta un final que, si bien hará que alguno tenga ligeras sospechas respecto a su desenlace, también logrará sorprender a más de uno.
Secuestro es una cinta que tal vez quiere abusar en demasía del podre de la sorpresa, dejándonos algún buen giro arguemntal (especialmente a mitad de la película...que aquí no desvelaremos) pero que tiene especialmente su mejor baza en su buen reparto, entre los que destaca especialmente el papel de Blanca Portillo, una mujer tan tierna con su hijo como dura con el resto del mundo, capaz de rebelarse como una loba defendiendo a su cachorro pero manteniendo casi en todo momento un talante calculador, así como el del joven actor que encarna a su hijo, March Domenech, pero sin olvidar un buen elenco de secundarios entre los que no faltan un buen número de nombres conocidos.
Película con un  sentido más que correcto de la tensión y un ritmo que mejora notablemente en su introducción y desenlace Secuestro es una película con especial cuidado a la hora de crear atmósferas (la casa de Patricia, el local de pelea de perros...) aunque quizás no tanto en su vertiente sonora, con demasiado apego a los efectos de sonido (por no faltar no falta ni la tormenta) o a una banda sonora en exceso evocadora (y que en algún corte recuerda poderosamente a la de Señales), pero que en ocnjunto nos deja un eficaz conjunto de cine con aroma negro y una historia entretenida de buenos no tan buenos y malos que también puede ser víctimas, y a la que hasta le perdonamos un poco sus continuos intentos de jugar con nosotros (la chaqueta del perchero, los "cadáveres" cubiertos con mantas) en esas casi dos horas de misterio con fuerte carga emocional.
Más de una sorpresa para los que acudan a enfrentarse a este Secuestro, que llega a las salas españolas el 19 de agosto.

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