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martes, 22 de diciembre de 2015

MANZANITAS INFORMÁTICAS

Todavía recuerdo como hace unos añitos durante unas vacaciones estuve en el Museo de cera de Barcelona y pude escuchar a una pareja de alegres ancianitas como la figura de Wifredo el Velloso (personaje historico del siglo noveno) se parecía enormemente al original. Tal vez me hallaba ante dos vampiros milenarios sin yo saberlo, pero el comentario no deja de tener su aquel, sobre todo gracias al gran número de fotografías que nos han llegado de dicho período. En el caso del cine al género biográfico le pasa lago similar, y hay gente capaz de encontrar parecidos sin fuentes pero claro aquí también entran en juego otros factores....y hoy hablamos de la última, hoy toca Steve Jobs.
 Durante más de tres lustros, entre las presentaciones de su primeos trabajos hasta la del cásico iMac Steve Jobs demostró ser un hombre inteligente y detallista, pero también poseedor de un espíritu conflictivo y egomaniaco que le hacía chocar constantemente con su compañeros de trabajo, jefes, y su propia familia, su hija Lisa y la madre de esta.
Basada en la biografía de Walter isaacson y sin ser la primera película dedicada a su controvertida figura Steve Jobs no es una biografía al uso, centrándose en los momentos previos a las presentaciones de tres de sus creaciones más emblemáticas en 1984, 1988 y 1998.
Con un reparto de lujo que, a pesar de moverse durante la mayor parte del metraje entre terrenos más tecnológicos y económicos con escenas enteras dedicadas a las caracterísiticas de un producto y su proyección en el mercado, el guión sabe sin embargo ir creando poco a poco unos persoaajes llenos de matices que sus intérpretes saben dotar de gran fuerza, en especial un inmenso Fassbender  que se come literalmente la escena desde un primer momento, y al que solo parece saber poner cerco una increíble pero casi irreconocible en un primer momento Kate Winslet (un personaje que curiosamente parece rejuvenecer con los años a diferencia del resto..que alguien me lo explique), mientras todo un elenco de maravillosos secundarios  contribuyen a añadir más incógnitas al enorme ego de un protagonista que solo a través de los fracasos tanto laborales como sentilmentales sabrá ir abriendo paso a su faceta más humana, en concreto la de padre.
Steve Jobs es una película que oscila continuamente entre la frialdad de la tecnología y las más profundas emociones humanas, con un guión cuajdo de referencias con algún diálogo brillante de esos que entusiasman tanto a público como intérprete, dejando grandes lagunas de tiempo entre las que sus personaejs madurarán no sin cuestionarse a sí mismos,, en una evolución que si tenemos en contacto esto no resulta tan forzada, pero capaz de agotar al propio espectador con una intensidad exarcebada incluso en momentos que lastran tanto el ritmo como aquellos que probablemente interesen  más a un informático de carrera (que quizás entienda más de qué estan hablando...y eso qeu hasta al mismo Jobs encarnado por Fassbender le cuesta memorizar según que datos como vemos en las escenas finales) y que solo consiguen que esta historia, en principio llamativa y apasionante pierda parte de un interés que solo las escelentes interpretaciones de los actores logran hacernos recuperar.
Con un lenguaje cienmatográfico al que ya nos tiene acostumbrados su director, rico en imágenes documentales y con un ágil montaje, lo mejor de esta película en todo su conjunto son unos vivísimo s actores en una cinta que casi se nos puede antojar con matices una ambiciosa obra teatral en tres actos con , eso sí, un acabado impecable.
  
Irregualr resultado para una película que apasiona y frustra a partes iguales, Steve Jobs se estrena el 1 de enero de 2016.

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