NOCTURNEANDO DE DÍA

Decíamos ayer...y antes de ayer, y el otro día...y la semana pasada...y ¡desde marzo, que narices! que llegaba Nocturna, y al fin llegó, eso sí, irónicamente de día. La primera sesión se esparaba con emoción, y esta se abrió con la proyección (toma triple ripio) de 2037 (no, no es ningún homenaje a Wong Kar-Wai), un diveritdo corto de el Terrat que casi se antoja como el reverso oscuro de El Ministerio del tiempo.
El plato fguerte de la primera sesión era sin embargo Indigenous

Con un arranque tipo found footage que muy pronto se pasan por el arco de triunfo (salvo alguna escena intercalada) la película es la típica historia de turistas inconscientes que se internan en lo desconocido y se llevan una sorpresa morrocotuda (no tanta, les llevan advirtiendo la primera mitad de la cinta, pero el morbo es el morbo) al toparse con el bicho de marras, en este caso un viejo conocido: el chupacabra (así en singular). Si bien tiene alguna idea original (el uso de facebook y similares) y alguna escena muy divertida (los testimonios finales, o el corte de la carta de ajuste) la película tarda un poco en arrancar y en su desarrollo abusa de las escenas nocturans de huida a trompicones, recordándonos casi a lo peor de la olvidable Atrocious. En su grueso entretenida sin más, si bien más de un espectador salió pelín, si se me permite el chiste horrible, indignadous.

Avanzando la tarde pudimos disfrutar de otro corto, la inquiietante fábula laboral Flexibility, amén de otra cinta de terror. The house on Pine Street.

Aterrador cuento de fantasmas con embarazada incluída la película se inicia sutilmente (una puerta que se abre, una sombra esquiva) para volverse poco a poco una pesadilla, sin excesivas estridencias hasta su arco final, que sólo parece afectar a su protagonista. Con un original enfoque (a su desenlace me remito) la cinta sabe crear una aterradora atmósfera con muy buen uso de la oscuridad (si bien la mayoría de las escenas tiene lugar de día la luminosidad nunca es total) e incluso de los tópicos (niños pequeños que ven cosas que nos vemos, amigas aficionadas al espiritismo de chichinabo, jovencitas mudas y otros adorables seres), regalándonos una historia de corte clásico que deja muy buen sabor de boca.

Y por fin la inauguración formalemente dicha. En su photocall pudimos ver al grandísimo Robert Englund, que además estuvo muy simpático con prensa y fans, amén del homenajeado Alexandre Aja, al cual se le entregaría esa misma noche el premio Nocturna Visionary Award, y que supo agradecer en su discurso.

Tras la proyección del spot homenaje a los 30 años de Pesadilla en Elm Street, presentado por su director, Sergio Morcillo, embargado por la emoción de proyectarlo ante dos de los grandes (http://monigotorium.blogspot.com.es/2015/05/prenocturnicoleando-y2.html ), pudimos ver además un adelanto de Extinction, con un airecillo de The walking dead pero en un futuro dominado por la nieve y de próximo estreno este verano, así como el curioso y poético corto Clarke's third law.
Pero lo relevate era la proyección de la última película de Aja, Horns.

Bizarra fábula sobre la lucha entre el bien y el mal inspirada en la obra homónima de Joe Hill, la película cuenta la historia de Ig, un joven acusado de la muerte de su novia de toda la vida y al que todos creen culpable, que para su asombro ve como de la noche a la mañana le crecen unos cuernos que despiertan y deshiniben  los más bajos instintos de cuantos le rodean. Si bien la cinta nos deja grandes momentos, especialmente cuando más alocada se vuelve (la pelea por la exclusiva, la reacción de los habituales y el dueño del bar...), así como escenas de cuidada  y original estética (el protagonista armado de una horca y rodeado de serpientes empieza a verse como el mismo diablo) y la aparición de una excelente selección de secundarios la película pierde muchos enteros cuando más trascendental y dramática se vuelve, amén de adolecer de uns ligera falta de ritmo en su tramo final que desemboca en un desenlace bastante ridículo (y que ignoro si es calcado del libro original). Seguimos teniendo al Aja de las escenas trepidantes y divertidas, pero en menor dosis de lo que nos tiene acostumbrados...casi hubiese sido mejor otro remake.

 

Y con ello concluyó la primera jornada...a contar las horas, que esta noche a las diez nuestros sueños se hacen realidad en forma de la clásica Pesadilla y con uno de sus demiurgos presentes...Monigotorium estará allí.