En un año tan raro como ha sido 2025 (y es que ha pasado de todo. A nivel personal tambien) el cine sigue siendo esa tabla, si no de salvación, si de ligera liberación, a la que muchos nos aferramos sin que nos digan que no cabemos. Y por no perder las buenas costumbres aquí viene la selección de lo mejor del año. Porque yo y ellas lo valemos.
Frankenstein la cinta gótica de Guillermo del Toro era de lo más esperado de este año y no decepciona. Aunque se podría cuestionar su fidelidad al texto original estamos ante un espectáculo de cuidada factura que merece disfrutarse en pantalla grande. Un trabajo de artesano en el que cada imagen cuenta.
The brutalist épica fábula sobre un arquitecto enfrentado a sus propios demonios, esta película de espíritu clásico consigue enganchar tanto con su historia como con la fuerza de sus fotogramas. Una pieza de otra época pero de una modernidad apabullante.
Bugonia la última locura de Yorgos Lanthimos nos trae a unos actores en estado de gracia y una trama tan inclasificable como absorbente. Mucho humor negro para una fábula ecologista y maliciosa.
La semilla de la higuera sagrada perturbador retrato de la paranoia en el entorno familiar esta brutal crítica a los regímenes totalitarios es una película que logra sorprender sin perder fuerza en ningún momento.
La hermanastra fea la que se podría considerar heredera espiritual de 'La sustancia' supone una auténtica bofetada a la búsqueda de los cánones estéticos usando como escusa el cuento de La Cenicienta. Un plato para estómagos fuertes, pero delicioso.
Memorias de un caracol animación tradicional al servicio de una historia que debe mantenerse fuera del alcance de los niños. Divertida, osada y fresca, consigue que riamos a mandíbula batiente mientras intentamos contener las lágrimas.
No other choice Park Chan-wook crea una auténtica comedia bufa sobre el mercado laboral en la que no da puntada sin hilo. Una película que sabe sacar el mejor partido a sus inesperados giros. Hay que verla para creerla.
La mercancía más preciosa conmovedora cinta sobre una campesina que consigue su sueño de tener un hijo con dramáticas consecuencias. Dolorosa pero necesaria.
Si pudiera te daría una patada La maternidad hecha tragicomedia en una historia que se mueve continuamente en la frontera entre la locura y la cordura. Una protagonista sobresaliente y una escena, la del hámster, para el recuerdo.
Sinners ecos de 'Abierto hasta el amanecer' en este drama racial con trasfondo terrorífico de cuidada estética. Más innovadora en su forma que argumentalmente esta película conquista, a pesar de un desenlace forzado, con sus detalles y la fuerza de la música.
Ciñéndome como siempre a diez, cerca han quedado cintas como 'The monkey' o ese Superman que demuestra como además de hacernos creer que un hombre puede volar debe entretenernos. Por no hablar de la reivindicable 'Blue moon' o la muy entretenida secuela de los tipos malos'. Y aunque no me entusiasme 'Weapons' ¿puede ser la tía Gladys el personaje del año?. Sí no se queda cerca.
El año que viene más y mejor: el cine sigue siendo una fábrica de sueños.





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