Aunque ahora estemos lejos de ese conflicto Mario- Sonic que vivimos a finales de los 90 y más allá a día de hoy se puede decir que el veloz erizo azul ha superado al saltarín fontanero en un aspecto: sus aventuras han inspirado más de una película. Así apenas dos años después de la primera entrega y de la mano del mismo director, Jeff Fowler, Sonic regresa muy bien acompañado (tal como prometía su escena post créditos) de otros dos clásicos, Tails y Knuckles, para llevarnos a la carrera a una nueva aventura.
Continuación estricta de la anterior película "Sonic 2" arranca en el planeta en el que dejamos varado al Dr. Robotnik para presentarnos a la nueva némesis de la función, Knuckles (que en la versión original cuenta con el vozarrón de Idris Elba). Este es solo el jugoso cliffhanger que nos devolverá a un Sonic ya plenamente asentado en la comunidad en la que le dejamos al final de la anterior gran batalla enfrentado a un nuevo reto: quedarse solo en casa mientras sus amigos acuden a una boda en Hawaii. Pero por supuesto esto no durará mucho tiempo, cuando nuestro héroe descubra que debe hallar una poderosa esmeralda antes de que sus enemigos la encuentren y hagan uso de ella para llevar a cabo sus malvados planes. "Sonic 2" apuesta por la acción con toques de humor, incluso de esos que agradecen los adultos, y algún giro realmente delirante (esa boda que acaba de la manera más inesperada posible y que nos regala alguno de los mejores momentos de la cinta), al igual que su predecesora. Su buen sentido del ritmo (en algún momento algo precipitado incluso, todo hay que decirlo, haciendo que se desaproveche alguna escena que podría haber dado más juego) es la mejor baza de una película que es un auténtico viaje para su protagonista y no solo en el sentido físico y que le llevará por una gran variedad de escenarios, de la nieve a la playa, a la par que comienza a conocer a unos personajes de la que ya es franquicia.
"Sonic 2, la película" es puro entretenimiento, pero sin duda los que más la disfrutarán son los pequeños de la casa. Conservando algunos elementos que ya funcionaron bien en el primer Sonic como un Jim Carrey más desatado aún si cabe en su encarnación del Dr. Robotnik a los que suma otros nuevos como un nuevo robot gigante la nueva película del velocista azul apuesta por una fórmula que ni sorprende ni apabulla pero funciona. Puro cine de palomitas, de ese que hay que disfrutar hasta el final, y más cuando una vez acabada la trama nos resumen esta con estilo videojuego retro (algo que ya se hizo en la primera parte) y le añaden una escena de esas que dejan el listón muy alto de cara a una hipotética tercera parte que, visto lo visto, sin duda llegará. Una buena excusa para volver al cine en familia (de hecho "Sonic. La película" fue una de las últimas cines en pasar por cines antes del cierre forzoso de 2020). La espectacularidad de sus escenas de acción la hacen merecedora de verse en pantalla grande: es hora de recuperar los buenos hábitos.
"Sonic 2, la película" llega a las pantallas españolas el 1 de abril
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