Legos del Monigotorium

lunes, 30 de septiembre de 2019

BALONES Y MENTIRAS

En las fábulas con moraleja, que suelen ser las buenas, mentir nunca suele ser buena idea, y más en el caso de niños traviesos y jovencitos atolondrado. El otro lado, el de las mentiras piadosas se tiende a ceder a adultos con buenas intenciones. Una pequeña mentira da la vuelta a los roles y a la jugada, con un niño que miente, pero que lo hace para sacar a su padre de un bache emocional del que solo puede sacarle una mentira...y de las grandes.
A pesar de un fondo deportivo muy acusado, tomando como base la historia de un pequeño genio balompedico que, habiendo quedado a las puertas de ser seleccionado por el Arsenal, decide contarle a su padre que ha entrado en el equipo para no destrozar más a un hombre hundido por el paro y un divorcio, nos encontramos ante un amable drama familiar. Una trama con alguna chispa de comedia y que revela como la esperanza puede cambiar a la gente, y para bien.
Un mensaje hermoso, aunque fuera de el tándem padre-hijo da poca entidad al resto de los personajes (sorprende que no haya ni némesis propiamente dichas...tememos más que se descubra la mentira por sus propios propagadores que porque alguien malintencionado se vaya de la lengua), que orna una historia parca en suspense (a pesar de la mentira y la bola que va creciendo a su alrededor afectando a madre, amigos y prácticamente todo el barrio. El fútbol es lo que tiene) pero que se ver con agrado e incluso un poquito de complicidad. Algo que logra especialmente gracias a unos personajes simpáticos (por no caer mal no cae mal ni la nueva pareja de la madre, y eso que es el típico personaje destinado a convertirse en el ogro de un cuento de este tipo) encarnados por unos actores que saben insuflarles naturalidad, destacando especialmente sus intérpretes infantiles, en particular un protagonista que sin dejar de ser un niño sabe transmitirle toda la madurez necesaria a su rol.
En Una pequeña mentira el fútbol es solo la puerta de entrada. Pero es algo que puede invitar a disfrutar de ella a un público en el que quizás no pensemos inicialmente al enfrentarnos a una cinta como esta: el infantil. No es una película como la popular Los futbolísimos, con sus altas cotas de suspense y comedia. Es una película agradable, de esas a las que les gusta despedirse sin cabos sueltos y dejar la sensación de que el mundo, a pequeña escala, puede ser un rinconcito mejor para todos. Una entretenida cinta para los adultos, pero también para los más pequeños, con unos personajes cuyo comportamiento no es modelo a imitar, pero que sí nos dan una hermosa perspectiva de las auténticas prioridades en la vida.
Una pequeña mentira llega a las pantallas españolas el 4 de octubre.

viernes, 27 de septiembre de 2019

TIGRE Y SU CLON

¿Pensabas que tenías problemas con tus hijos? Eso es porque no tienes un clon. Esa es más o menos la conclusión rápida que podemos sacar de Géminis, la cinta con la que Ang Lee vuelve al terreno de la acción que ya probó en Tigre y dragón o Hulk.
No es la primera vez que un hombre de acción se enfrenta a su doble más joven y más o menos malvado ya sea por tratarse de un ser no humano (Terminator: génesis), ya sea vía viajes en el tiempo sin tambor de detergente mediante (Looper) pero en el caso que nos ocupa Will Smith, un viejo amigo del género, hablamos de clonación pura y dura.
Génesis parte remotamente de la tesis del falso culpable, en un sentido relativo,  presentando a un asesino profesional, rico en destrezas mortales, que al decidir jubilarse descubre como los mismos que le contestaron intentan acabar con su vida. Duro de matar, y en vista de que arrojarle algún tipo de explosivo potentísimo nos dejaría sin película, la única solución parece residir en enviar a su propio clon, gestado dos décadas antes y que parece ignorar su propia identidad genética, provocando una frenética persecución por tres países y dos continentes.
Hasta aquí nada nuevo. Chico, chica, amigo con carisma capaz de sacarle las castañas del fuego, unos cuantos cadáveres de secundarios prescindibles por el camino y un considerable despliegue de artillería y juguetitos letales varios, acompañados de una buena banda sonora que sabe dar el do de pecho en los momentos álgidos. Pero en las manos de un cineasta como Lee, un artesano capaz de regalarnos una de las cintas de acción más hermosas de los últimos años,  este argumento se convierte en una película rodada con mimo. Una de esas raras avis a las que el 3D les beneficia, aumentando la intensidad de unas persecuciones y peleas bien coreografiadas que demuestran que un tipo de cine que parece haber echado los restos todavía puede sorprendernos. Porque nos encontramos ante una obra que, a pesar de desear añadir al cóctel un poso sentimental, reflexionando sobre las segundas oportunidades y el verdadero peso de la paternidad, brilla en sus escenas de acción, aunque a veces trasluzca
demasiado el (excelente) trabajo de los dobles de acción, a las que beneficia en realidad la tecnología HFR a 120 fotogramas (que deja en pañales la tan comentada de El hobbit hace unos añitos)
Una película que demuestra que hay cine de acción y cine de acción, que el entretenimiento aunque recurra a los clichés puede mostrar su mejor cara si se rueda con mano experta.

Géminis llega a las pantallas españolas el 10 de octubre.

lunes, 23 de septiembre de 2019

FUTURO NEGRO, GATO BLANCO

No se dejen engañar por el póster. Tan cerca, tan lejos no es una historia de amor. Es como, quizás refleja su título original, Deux moi, la historia de dos seres desparejados, de dos personas solas en un  París que a veces, como su metro, es un hormiguero lleno de gente, pero donde la cantidad no salva a las personas de la soledad. Dos historias que coinciden en más de un punto, aunque en otras contrastan furiosamente. Para saber si llegan a cruzarse deberemos conocer ambas...en inicio por separado.
Sería fácil pensar en esta película como en una de las muchas cintas de Woody Allen. Dos personajes, hombre y mujer, en la treintena, sin pareja y con frecuentes visitas a unos psicoanalistas que en ocasiones parecen dar más bellas respuestas que buenos consejos. Pero el resultado está lejos del mundo cinematográfico de este, renunciando a la mordacidad y el elegante sentido del humor. Nos encontramos sin embargo ante la historia paralela de dos personas que viven en la misma calle, que compran en la misma tienda y que toman el mismo transporte para ir cada día al trabajo. Dos  personas que suelen coincidir en estos terrenos comunes pero que apenas se percatan de la presencia del otro y que esta película nos junta en el tablero para que, llevados por nuestras referencia cinematográficas, nos dejemos arrastrar por el que es un casi continuo juego del despiste, dejándonos llevar por esa imagen ideal de los condenados a encontrarse. Y eso que a pesar de todo lo expuesto ni coinciden en carácter, ni en gustos ni, por ponernos picajosos, en hábitos de sueño, con una protagonista que duerme en exceso y un protagonista que apenas sí logra conciliar el sueño.
Tan cerca, tan lejos podría ser perfectamente un dúo de mediometrajes, sin correspondencia ninguna, con alguna contada excepción (el gato perdido por uno que va a ser encontrado y adoptado por la otra...esto pasa por no poner carteles. Claro que igual así la cinta duraría menos). Dos historias en la que una de las dos, la de Melánie, parece perder continuamente peso e interés frente a la de Rémy, haciendo que la película pierda ritmo continuamente mientras se debate entre el drama y la comedia suave.
Una cinta que en más de una ocasión constituye la sucesión de pinceladas desparejas de dos vidas. Nos encontramos personajes robaescenas, como ese superprofesional tendero o el gato Nugget, episodios llamativos como el sueño con los robots, bellas tomas de un París casi fantasmal y diálogos que consiguen robarnos la carcajada. Pero el carisma de sus protagonistas nos logran arrastrarnos a una historia con mucho de generacional y una gotita, incluso, de fatalismo.
Una historia que juega con nuestras expectativas pero, aunque en más de un momento logre entreternos, no consigue emocionar. Será porque sus protagonistas viven en la única casa del París cinematográfico desde la que no se ve la Torre Eiffel...

Tan cerca, tan lejos llega próximamente a las pantallas españolas

jueves, 19 de septiembre de 2019

JUANITO RAMBEZ

Decir un nombre y que inmediatamente una imagen concreta acuda a nuestra mente no es precisamente sencillo. Rambo (bueno, si nos ponemos picajosos John Rambo) es una de esas exceciones. El que es el personaje emblemático de Sylvester Stallone (vale, junto a Rocky, pero este ya parece haber colgado los guantes en beneficio de una nueva generación) abandona la jungla y el exotismo para llevarnos a Arizona y su vecino México para presentarnos una historia familiar en la que pueden acabar imponiéndose el terrible pasado de nuestro héroe. Su nombre, en un guiño al título original de la primera entrega, es Rambo: last blood.
 La que ya es la quinta película dedicada a las desventuras del exboina verde, tras un arranque que a más de uno le recordará remotamente a otras películas de su protagonista como Pánico en el túnel o Máximo riesgo (y que puede que a algún espectador le deje mal cuerpo a raíz de las horribles consecuencias de la gota fría en la península), vuelve a presentarnos a un hombre con aspiraciones heroicas al que, a pesar de haber encontrado una relativa calma en su rancho, todavía atormentan los recuerdos de la guerra. Un héroe que podríamos calificar no ya de crepuscular, sino ya directamente de nocturno, que ha intentado rehacer su vida con una abuela y su nieta, a la que trata como una verdadera hija, pero para el que la paz no va a durarle mucho.
Sin renunciar a ser una cinta de acción este nuevo Rambo tiene vocación de drama. No se puede negar que en parte es herencia de la trayectoria de un personaje para el que el poso emocional siempre ha sido muy importante, pero este apartado, que presenta una realidad tan terrible como la trata de blancas por parte de las mafias, no deja de remitirnos a algún trabajo previo de su director, Adrian Grunberg (en concreto Vacaciones en el infierno...sí, sí esa de Mel Gibson en una cárcel mexicana) no consigue conquistar el corazón del aficionado.
Porque este Rambo no deja de ser una película para amantes del cine de acción en general y de las cintas de uno de los clásicos del género en particular. Una película a la que el drama no beneficia, sino que gana cuando más alocada se vuelve, con momentos tan antológicos como ese Sergio Peris-Menceheta, malo malísmo de turno, llamando Juanito a nuestro Rambo (sí, resulta curioso que en esta cinta el téndem de némesis esté encarnado por dos actores españoles, Peris-Mencheta y un Óscar Jaeneda que recupera el acento mejicano de Cantinflas...aunque también pasa por ahí una Paz Vega para echar una mano al traumatizado héroe) o la tortura que inflije a uno de los villanos menores para que confiese (y que hará cerrar los ojos al espectador menos curtido...y, ojo, advertimos solo es el aperitivo) hasta llegar a unos últimos 20 minutos, pura antítesis del resto del metraje, en los que imperará la adrenalina más descarada con gruesas pinceladas de gore, constituyendo lo mejor de una cinta que da lo mejor de sí cuando abandona el carácter de cine denuncia y se deja llevar por su vertiente más animal, con unas escenas de una violencia tal que choca con su etiqueta de cine comercial.
Rambo: last blood es así una película de contrastes. Por un lado un drama familiar que no termina de funcionar pero que intenta dotar de alma y motivaciones al personaje, y que no deja precisamente bien parados a sus vecinos del sur. Por otro acción sin tabúes, exagerada pero tremendamente disfrutable para amantes de la vertiente más salvaje del género y con un fuerte toque ochentero (ahí está esa planificación entre McGyver y El equipo A que justifica la incomprensible construcción de túneles por parte del protagonista...aunque digamos que mientras en la serie de los mercenarios las furgonetas daban una espectacular vuelta de campana y todo el mundo salía apenas un poco magullado aquí no tienen la misma suerte) que deja un buen sabor de boca. Una cinta irregular, pero entretenida, que guiña el ojo a los que se criaron con el personaje y que remata con unos títulos de creativos que a la par que homenajean lo más emblemático de la saga se dejan llevar por una banda sonora de una épica deliciosa.
Rambo: last blood llega a las pantallas españolas el 27 de septiembre

miércoles, 18 de septiembre de 2019

FLAMENCOS FUMADORES


Hay directores a los que cuesta ponerles cara. Rostros ocultos tras la cámara que no podemos calificar ya ni de busto parlante, y que se limitan a un nombre en la pantalla del que a veces ni siquiera nos percatamos.
Por suerte para nosotros en lo relativo a un cineasta como John Waters, profeta del trash y creador de universos sin tabús, no es el caso.
Waters es todo un icono inconfundible que ha paseado su palmito por series y películas interpretándose casi a si mismo, de lo que es buen espejo el episodio Homer's phobia de Los Simpsons, tan inconfundible como un universo de una libertad cinematográfica abrumadora.
Por eso y más el CSA Tabacalera de Lavapiés en su cine fórum La claqueta le dedica todo un ciclo todos los viernes de septiembre y principios de octubre a las 20:00 con lo mejor de su obra:
  • 21 de septiembre Pink Flamingos
  • 28 de septiembre Desesperate living
  • 4 de octubre Polyester
  • 11 de octubre Serial mom
  • 18 de octubre Pecker
Y si es posible hasta intentarán recuperar hasta intentarán recuperar el odorama de Polyester...ahí es nada.
Septiembre ya no es solo la vuelta al cole, es el mes de la vuelta a los clásicos del lado oscuro.
Entrada libre hasta completar aforo.

lunes, 16 de septiembre de 2019

NOCTURNA A LA VISTA

A poco más de un mes de su comienzo (N del 22 al 26 de octubre) el festival de cine fantástico de Madrid empieza a confirmar algunas de sus proyecciones.
A la del aniversario de El cuervo, con la presencia de su director se suman Finale, Amigo, Koko-di Koko-da, Luz y El signor diavolo, todas ellas a competición.
También acogerá el estreno mundial de A night of horror: nightmare radio, una terrorífica antología que incluye los trabajos de Pablo S. Pastor y Sergio Morcillo, cuyos anteriores trabajos pudieron verse en previas ediciones del festival.
También podrá disfrutarse de Equals, La octava dimensión y Cinco reyes en la sección oficial de cortometrajes.
Y esto es solo el aperitivo...seguiremos informando.

¿POR QUÉ NO?

¿Fue Salzillo abducido por visitantes?¿Es el carajillo un canalizador de encuentros alienígenas?¿Será posible que el murciano sea en realidad un híbrido humano- extraterrestre? Y sobre todo ¿Existen las pirámides murcianas? A alguna de estas preguntas y muchas menos responde Pirámides murcianas, un controvertido análisis de las pruebas que pueden demostrar la relación entre restros arqueológicos distribuidos por toda Murcia...o puede que no.
Pirámides murcianas sabe aunar con inteligencia lo mejor del documental y la comedia. No se mete en los procesos terrenos del mockumentary, tratando datos y situaciones irreales. Y por supuesto no constituye un documental en su sentido estricto, sino que se aproxima a un tercer género a bautizar tomando datos reales, tanto históricos como matemáticos o culturales, para interpretarlos como mejor le conviene y plantear la existencia de todo un conjunto de pirámides y complejos ceremoniales en la región de Murcia...construidos con ayuda alienígena, por supuesto, un asunto que plantea con la seriedad propia de clásicos como Leslie Nielsen, por supuesto.
Versión hiperbolizada y con humor a prueba de bomba, de ese que podría hacer que el espectador menos curtido se plantease si se encuentra ante una comedia involuntaria, de esos documentales históricos a los que nos han acostumbrado los canales de pago pero que se hermana con los antiguos programas de Jiménez del Oso y los más recientes de Cuarto milenio, nos hallamos  ante una película de esas que no se olvida a los pocos días. Un film que sorprende por el buen partido que saca a sus escasos medios ( desde el uso de drones a las imágenes digitales que hacen que en algún parpadeo hasta parezca una película cara y todo) y por conseguir instruirnos deleitando (aunque todavía no sepamos sobre el qué exactamente) acerca de un tema tan descabellado que nos hace hasta soltar una lagrimita...de risa.
Pirámides murcianas ha llegado para quedarse. La carta de amor de unos fans de  oculto que han decidido usar sus conocimientos para el mal, según como se mire. Si bien parece cortarse en el momento justo, con una duración similar a la de los programas en que se inspira, el concepto, para horror de ufólogos y otros entendidos paranormales, que no paranormalmente entendidos, pide...no, incluso exige, mucho más. Próximas entregas sobre el yeti en Cuenca o los avistamientos de Nessie en el lago de Banyoles serán recibidas con los brazos abiertos.
La abducción del espectador por Pirámides murcianas puede estar más cerca de lo que parece...más información en sus cuentas de Twitter e Instagram @PiramidesMurcia
¡Última hora! En la Madrid Games week se proyectará el 4 de octubre de 15 a 17 h...no se garantiza la ausencia de hombres de negro.

jueves, 12 de septiembre de 2019

SITGEANDO 2019

En un panorama en el que el cine de terror no tiene tendencias claras, sino que el cine de terror en sí mismo es tendencia, como ha afirmado Ángel Sala, llega un año más el Festival internacional de cine de Sitges, que ha sido presentado hoy en el Cine Doré de Madrid.
Cita clásica con el fantástico, Sitges abrirá, como se confirmó hace unas semanas, con En la hierba alta, en la que se entregará el premio Máquina del tiempo a Patrick Wilson, pero hoy además se ha confirmado que se cerrará, en un año que no contará con el famoso maratón sorpresa, con la terrorífica The vigil y El camino: una película de Breaking bad, tras la que tendrá lugar un Q&A con su protagonista, Aaron Paul.
Tomando como leitmotiv Mad Max, cinta a la que se dedica el cartel de este año, y cuya presencia veremos en las exposiciones y en una mesa redonda en torno a la madmaxplotation, Sitges contará con la presencia de premiados como Charles Band, del que podrá verse una retrospectiva y que será el maestro de ceremonias de la zombie walk, o, en un año en que se incide especialmente en el papel de la mujer en el género, o Maribel Verdú, a la que se entregará el premio máquina del tiempo y a la que podremos ver en uno de sus últimos papeles en El asesino de los caprichos.
También se podrá disfrutar de sorpresas como Vaya luna de miel de Jesús Franco, desaparecida durante casi 40 años y que ya se pudo ver en la celebración del 30 aniversario de la Filmoteca española, la restaurada Crash de Cronemberg, el nuevo mediometraje Lux aeterna del premiado Gaspar Noé o la recuperada Tammy and the T-Rex.
Pero por supuesto no faltarán las secciones de siempre. La sección oficial nos presentará producciones independientes, con especial atención a los nuevos realizadores, con propuestas de países menos habituales en nuestras pantallas como Turquía con The antenna y hasta 5 óperas primas nacionales tan prometedoras como Ventajas de viajar en tren, El hoyo, Paradise Hills, Cuerdas o Amigo, que se presentará acompañada del corto Normal. Nuevas visiones traerá sorpresas como su cinta de clausura Siren in The shadows o el programa doble compuesto por Zombie child y el documental Heil Satan?. Órbita seguirá trayendo lo mejor de la acción y el thriller con películas como Guns Akimbo. Midnight X-Treme seguirá centrada en maratones de madrugada para paladares cutidos como la cinta Porno, que se presentará en la noche + weird. Y por supuesto Panorama y Anima't guardan más de un as en la manga como Human Lost, que parece llamada a ser el anime del año.

El festival tendrá lugar entre los días 3 y 13 de octubre. Sus horarios pueden consultarse ya en https://sitgesfilmfestival.com/cat y a partir del día 18 podrán comprarse las entradas o, en el caso de los poseedores de un abono o pack el día 17 de septiembre. Es hora de empezar a planificar: Sitges, como siempre, tiene mucho que ofrecer.

martes, 10 de septiembre de 2019

CENTAUROS DE LA SIERRA

Hay un chiste, antiguo ya, que dice que los vascos nacen donde les da la gana. De un género tan clásico como el western se puede decir los mismo, y no solo me refiero a vertientes tan interesenates como el spaghetti western sino a propuestas tan curiosas como El viaje de Arlo o Sukiyaki western Django, que han sabido transportar su espíritu a mundos tan lejanos como la prehistoria o el lejano oriente. Llega ahora el turno la España de la posguerra y su nombre Sordo.
Basada en el cómic de David Muñoz y Rayco Pulido Sordo nos presenta la historia de uno de los supervivientes de la operación Reconquista, una misión en las postrimerías de la II Guerra Mundial destinada a acabar con el fascismo en España a través de un pequeño ejército de revolucionarios que había entrado en la península a través de los Pirineos. Sordo tras una gran explosión en una fallida escaramuza nuestro héroe, Anselmo, se ve obligado a huir y esconderse de las tropas franquistas en el bosque cercano, mientras estos intentan arrancarle una confesión a uno de sus compañeros tomado prisionero. Un punto de partida que daría para más de un drama pero que aquí, tal y como reconocen sus propios personajes, se convierte en "una peli de indios", en la caza sin cuartel, escopeta en ristre, de un enemigo que sabe encontrar en la naturaleza y sus propios recursos, a pesar de la discapacidad qeu sufre, sus mejores aliados, equilibrando una lucha en inicio desigual.
Pero las semejanzas con el western no se reduce a un mero diálogo, ni al uso de armas y monturas sino que formalmente, desde la fotografía a la banda sonora la película sabe adoptar maneras de manual, con escenas tan apabullantes como la persecución a caballo o pequeños guiños como el atuendo que adoptará el protagonista en la huida o la actitud de los lugareños ante la llegada de los soldados, puro prólogo de duelo.
Sordo es una película con una primera parte brillante. Sabe presentar una trama que engancha, luchas y tiroteos bien coreografiados e incluso sorprendernos con algún giro de guión como el desenlace del almuerzo en la cabaña, así como sacar el mejor partido posible de unos entornos naturales que no nos hacen echar de menos el valle de la muerte o de un sonido brutal que sabe jugar con el contraste entre el sonido de la naturaleza o las armas de fuego y la sordera repentina de Anselmo. Pero una vez presentadas las cartas con elegancia la mano muta con la introducción de personajes que hacen flaco favor a la trama como esa mercenaria rusa cuyo papel no acaba de encajar (amén de dejarnos con más de una duda...¿nadie toma represalias tras el tiroteo en la cantina?) o ese lobo destinado a ser mera metáfora gratuita, perdiendo parte de la fuerza con la que arrancaba la trama.
No se puede negar que a pesar de la época y el país en que se desarrolla Sordo es un western con todas las de la ley, tanto a nivel argumental como formal, apartado en el que sabe brillar en su tratamiento de imagen y sonido. Pero tampoco que a la cinta parece sobrarle parte de su metraje, con una serie de opciones gratuitas que nos sacan del excelente clima en el que nos sumerge la primera parte del relato. Sordo queda así como una cinta irregular, pero con momentos magníficos, y que demuestran que el western es un espíritu capaz de envolvernos con su aroma a pólvora y el silbido de las balas, aunque no podarmos oirlo.

Sordo llega a las pantallas el 13 de septiembre.

jueves, 5 de septiembre de 2019

ESO ES

No ha hecho falta esperar 27 años para que Pennywise vuelva...entre esta noche y mañana el que ya es por derecho propio (aunque seamos sinceros... tramas aparte me quedo con su look de 1990) uno de los payasos malvados más emblemáticos vuelve a la gran pantalla. Aunque todavía no hemos podido disfrutar de la película de momento le dedicamos una paginilla:


miércoles, 4 de septiembre de 2019

CARTAS DESDE MI TUMBA

Pocos hechos hay tan traumáticos como superar la muerte de un ser querido, y pocos bálsamos hay mejores que hacerlo en grupo. Litus es una película bien consciente de ello, dejando un tiempo prudencial de duelo para reunir a sus protagonistas a través de una enigmática propuesta: el contenido de cinco cartas dejadas por el difunto a sus mejores amigos...y como supondrá el espectador avezado ello va a traer más de una revelación.
Dani de la orden, un director que probablemente nos suena más como director de comedia, con un éxito tan reciente como El mejor verano de mi vida, pero que ha sabido curtirse en terrenos tan dispares como el documental o la miniserie nos presenta un drama al que, desde el primer vistazo, podemos calificar de generacional, tanto por los problemas de unos protagonistas en transición a la plena madurez como por detalles como su ambientación e incluso banda sonora.
Basada en la obra teatral homónima de Marta Buchaca Litus, un origen teatral que no oculta con un respeto casi total a la regla de las tres unidades (poco se sale de éstas, con la excepción de un inserto de como murió el personaje que da nombre a la cinta) es una película que sabe perfectamente en que liga juega, haciendo referencia a la cinta británcica Los amigos de Peter, y presentando un heterogéneo grupo de amigos que cubren todos los tipos de lazo posible con el finado, desde su hermano hasta su exnovia. Sabiendo que su premisa no es la más original del mundo la película sabe sin embargo sacar lo mejor de los materiales de los que dispone. Sabe que en algún momento llegará la sorpresa, y de ella nacerá la catarsis (en este caso con un fuerte componente musical) pero por esto mismo sabe que su mejor baza es la carga emocional, y en este apartado sabe salir airosa, gracias a un elenco en el que, si bien no encontramos superestrellas sí a un grupo de actores versátiles cuyos rostros nos suenan tanto de la gran como de la pequeña pantalla como Quim Gutiérrez o Belén Cuesta.
Unos intérpretes que dominan la pantalla del comienzo al final. Nunca veremos a Litus, aunque su nombre, como si de una Rebeca cualquiera se tratase, planee por toda la trama desde su título. Pero a través del resto del personajes, un grupo que se enfrenta a unas decisiones que se les podrían antojar lejanas hace relativamente poco tiempo, como el gestionar el éxito o embarcarse en una relación matrimonial, llegaremos a conocerlo, consiguiendo insuflar autenticidad tanto a sus roles como al del ausente.
Aspectos lógicos y normalizados hoy, pero que en todavía pueden resultarnos tan chocantes en medio de algo tan íntimo como es el proceso de despedida de un amigo, como son el cierre de las cuentas en las redes sociales, la eliminación del grupo de Whatsapp o del perfil de la consola son unas pinceladas más que consiguen hacer que todavía nos metamos más en una historia que está perfectamente definida en su tiempo, pero que a la vez resulta atemporal. Una historia que nos han contado muchas veces, pero que muchas veces más puede ser contada, adaptándose a los nuevos tiempos pero sin perder lo esencial de unos sentimientos que siempre serán inherentes a todo ser humano.

Litus llega a los cines el 13 de septiembre.

lunes, 2 de septiembre de 2019

PARA QUIÉN DOBLAN LAS CAMPANAS

Ahora que parecía que todo el mundo se había apuntado a eso de "Te quiero 3000" llega una película que defiende que se puede querer hasta el infinito, matemáticamente hablando. Vivir dos veces no es una película romántica al uso aunque historias de amor hay: de infancia, de juventud y de vejez, aunque a veces y aun siendo entre las mismas personas no sean la misma.
Cuando pensamos en el tema del alzheimer en el cine español es fácil acordarse de la inmensa Arrugas, basada en el cómic de Paco Roca, o de ¿Y tú quién eres?, protagonizada por Manuel Alexandre y José Luis López Vázquez. Vivir dos veces se une al dúo con la historia de un viejo cascarrabias, profesor de matemáticas jubilado y poco amigo de las nuevas tecnologías, que se al enfrentarse a la terrible enfermedad que pretende arrebatarle su mente, aquello a lo que ha decicado toda su existencia, familia incluída, ve una pequeña tabla de salvación en el reencuentro con un amor de juventud (el alcance de la relación nunca llegaremos a conocerlo del todo pero se adivina más idealizada que otra cosa) cuyo paradero, tras toda una vida, desconoce.
Encauzada por los caminos de la road movie Vivir dos veces es una película con espíritu de comedia, pero con una fuerte vocación melodramática, algo que se aprecia especialmente en un desenlace que por supuesto aquí no desvelaremos, presentando una historia tan sensible, como, hay que reconocer, sensiblera, pero que sabe mantener los niveles entre drama y comedia con habilidad. Algo que consigue a través de una historia bien hilada, presentando la enfermedad desde sus primeros estadios logando tanto la carcajada como el ligero escalofrío (la llamada al periódico para reclamar que el sudoku...perdón, cuadrado mágico, es irresoluble) así que regalarnos metáforas tan simples como hermosas como la de ese grafitti que empieza a diluirse por efecto del tiempo.
Pero si algo consigue hacer de esta cinta lo que es un elenco de actores que sencillamente, saben estar redondos en sus roles, desde un protagonista, un grandísimo Óscar Martínez, que sabe pasar del hombre orgulloso no dispuesto a aceptar ningún tipo de ayuda a una persona más afable tras un viaje, tanto físico como espiritual, que sin duda cambiará su vida, a la debutante en la gran pantalla Mafalda Carbonell, en su papel de nieta sabelotodo que consigue ser tan irritante en ocasiones como profundamente entrañable, pasando por toda una rama de secundarios que consiguen tanto hacer reir como arrancar alguna lagrimita al espectador.
Vivir dos veces es una película que sabe tratar el tema tan espinoso que está tratando. Puede parecer que en ocasiones azucara una terrible realidad, cerrando hasta el más pequeño de los lazos de sus trama como lo hace ese símbolo de infinito que va a tener tanto valor a lo largo del metraje, pero también sabe tratarlo con respeto y realismo, sin dejar por ello de conseguir réplicas divertidas (el intento de soborno de la recepcionista de la clínica)...porque a veces no hay mejor manera de enfrentarse al abismo que con una sonrisa.
Vivir dos veces llega a los cines el 6 de septiembre