DE PASEO POR EL MONTE

Paz, tranquilidad...en el cine de terror el campo es cualquier cosa menos eso, y la gente no termina de escarmentar...no...que va. Entre los últimos grupos de masoquistas que se internan ahí, en lo más profundo del bosque, se encuentra la familia protagonista de The barrens (2012)

Con un comienzo que conocemos demasiado bien(agradable familia americana se dispone a pasar unos días en el monte para unirse más y resolver sus pequeños conflictos internos). La novedad inicial es que van a una zona de acampada, y aunque todos sepamos que al igual que ir al campo salvaje irse de campamento tampoco suele resultar muy buena idea, el pequeño grupo familiara traumatizado por a) la desaparición de su perro, b)el tener que esparcir por ahí las cenizas del abuelo y c)tener una hija en la edad del pavo y una madrastra comprensiva bajo el mismo techo pronto agarrará los bártulos y partirá hacia lo desconocido (lo desconocido en una reserva forestal a cuatro kilómetros del campamento más cercano) para enfrentarse...al diablo de Jersey. La película pretende jugar con la ambigüedad entre lo real y lo fantástico y si inicialmente consigue crear alguna escena desasosegante (el cuento junto a la hoguera) el conflicto generado por la figura de un padre enfermo ( en concreto de una rabia -el virus, no el sentimiento-que casi parece un castigo pseudobíblico por sus malas acciones) que no distingue las alucinaciones del mundo real no acaba de dar el punto una película que partiendo de una premisa de esas que resultan interesantes (la leyenda urbana del diablo de Jersey) acaba siendo...lo de siempre. En plata no es un horror con patas, pero la poca empatía de los personajes ( ese niño que más bien parece...er...una persona pequeña siniestra, pero sin el suficiente mal rollo como para ser inovidable, esa adolescente tópica), los recursos absurdos (es un lugar pequeño y explorado pero el padre se obstina en eliminar cualquier cosa que parezca un móvil restando las posibilidades de rescate) y un monstruo con toques de comprado en un todo a cien no terminan de ayudar. La sombra de El proyecto de la bruja de Blair es alargada, y hasta los mismos personajes son conscientes de ello...pero se agradece el esfuerzo.

Para fans del morenito de True blood (aquí algo desmejorado...yo me quedo con el hombre lobo) y fans de las pelis de gilis que se pierden en el bosque. Los de las cintas de hechicería quedarán más decepcionados.