NOCTURNEANDO (IV)

La cuarta jornada de Nocturna ha sido hasta el momento en conjunto la mejor y más intensa de las cuatro...empezamos con una agradable sorpresa después de otra que no lo era tanto (un corto cuyo nombre no mencionaré aquí que ya pudimos ver en la muestra Syfy y que ya nos había dejado con pocas ganas de repetirlo...aunque luego nos dió algo de pena la reacción generalizada al estar el equipo del mismo presente...): Cruel & unusual.

Con la brillante premisa de que el infierno (o purgatorio, nunca lo llegan a especificar) es un híbrido entre alcohólicos anónimos y un centro de psiquiatría barato en el que los asesinos (no se hace referencia a ningún otro pecado) viven el día de su crimen una y otra vez para después evaluarlo en grupo, se trata de un film original y divertido, que capta nuestro interés desde el primer momento a pesar de perder ago de fuelle en su tramo final. Muy recomendable

 

 Después llegó uno de los momentos más esperados del ciclo ( y yo me lo quería perder), la proyección del clásico La matanza de Texas, que este año ya cumple cuarenta añitos, con la presencia de su director, Tobe Hooper, que recibió el premio "Maestro del fantástico" de manos del mismísimo Leatherface. Fue una proyección inolvidables con tandas de aplausos en los momentos álgidos a la que siguió un turno de preguntas en las que el maestro nos deleitó con divertidas anécdotas sobre como se ha bía inspirado para diversos elementos de la película (en el médico de su familia cuando era pequeño, que le había contado mientras le curaba una herida en la cabeza que en un aocasión se hbía hecho para Halloween una máscara de auténtica piel humana o en una experiencia tediosa durante sus compras de Navidad  en la que, agobiado por la multitud, casualmente pasó por la sección de motosierras...y el resto es historia del cine) o sobre el rodaje (como el corte en el dedo de Sally fue auténtixco porque no funcionó el dispositivo de la sangre falsa y Hooper no lo supo hasta años después, o el pequeño accidente de Leatherface con su inseparable motosierra). Una sesión realmente inolvidable. 

 Y tras un corto preapocalíptico, previsible pero de buena factura, Mienin, llegó la que era para muchos la película más esperada, Lord of tears.

Perturbadora fábula gótica de excelente ambientación nos transportó a otros tiempos de terror clásico, con una historia sobre brujería muy original, con un puntito (en espíritu, no busquen sangre, por favor) de giallo y en alguna escena (la transformación del fantasma) una miguita de terror japonés, que en algún momento se me antojó como una buena entrega de Dylan dog (serie de la que soy fan incondicional). Si bien hay momentos que inicialmente pueden ser risibles (el comportamiento del personaje de Evey) estos se tornan plenamente justificados (salvo el baile con la pantalla de lámpara, eso ya me supera) en el desarrollo de la cinta) y se configura como una de las imprescindibles del festival.

. Y con esto ya sólo quedan las sesiones del fin de semana en la que se podrá acudir a los homenajes a Darío Argento y Jaume Balagueró. La cosa promete. Seguiremos informando.