Legos del Monigotorium

viernes, 25 de noviembre de 2022

VENUS. Darkness 2.0.

 

Jaume Balagueró siempre ha demostrado ser un director aficionado a la unidad de espacio. Desde el bloque de "REC" a los apartamentos de "Para entrar a vivir" o " Mientras duermes" o la casa de "Darkness" desarrollar total o en su mayor parte en una construcción concreta una historia se ha vuelto una de las marcas de la casa. En su última cinta este tiene un nombre, edificio Venus, que además de dar nombre a la película va a convertirse nuevamente, tras ese paréntesis que fue "Way down", en un portal al terror. O al menos eso pretende.
"Venus" arranca cuando una gogó de discoteca, Lucía, escapa de su trabajo llevándose una valiosa mercancía. Herida y en busca y captura por sus jefes, una peligrosa mafia, esta decide refugiarse en casa de si hermana, madre de una niña y a la que hace tiempo que no ve, sin saber que en el.piso de esta tienen lugar extraños sucesos. La película intenta fusionar así dos géneros, el thriller (aunque eso de que alguien cometa un crimen y huya para caer en las brasas no es nada nuevo. O si no que se lo digan a Marion Carne) y el terror, aunque manteniéndolos durante la mayor parte de la primera parte de la cinta en planos muy separados (de modo que hay un momento en el que podemos llegar a pensar que el apartado sobrenatural ha quedado en el tintero). Con un buen trabajo de sus secundarios, con un destacable aire costumbrista  (ese mafioso gourmet de los churros o ese inquietante pero afectuoso matriarcado de vecinas), y una fotografía que sabe adaptarse a sus ambientes "Venus" se va perfilando como una correcta historia de suspense en la que se van introduciendo calculadamente los elementos terroríficos, algunos quizás un poco con calzador, pero con una peligrosa tendencia al jumpscare. Pero cuando parece que todo está sobre el tablero (tranquilos, no haré spoilers), y ya en camino al desenlace, la película da un giro completo que la cambia completamente de tono y que es más que probable deje al espectador completamente descolocado. Con su protagonista convertida en una heroína digna de un rape and revenge la cinta muta en una alocada orgía de sangre poblada de seres grotescos con alguna inexplicable elipsis, pero en la que todo conecta tan adecuadamente que cualquier suspensión de incredulidad necesaria para disfrutar de una cinta de ficción salta directamente por la ventana.
"Venus" es una película con más de una idea interesante pero a golpe de niña visionaria, extrañas experiencias nocturnas, entes diabólicos y eclipse inesperado se antoja más una revisión con una miguita de gore de la muy recomendable "Darkness" que otra cosa. Lejos de otras cintas más redondas de su director esta "Venus" presenta tanto escenas memorables como otros dignos de vergüenza ajena, aunque no se puede negar que, si no decidimos abrazar sus aspiraciones trascendentes (algo que subyace desde los compases musicales  parejos a sus primeros segundos), puede hacernos pasar un rato entretenido...por nuestra cuenta y riesgo.
"Venus" llega a los cines el 2 de diciembre.


martes, 22 de noviembre de 2022

MANTICORA. ¿Quién te mentirá?

 

La mantícora es un ser con cuerpo de bestia, cola de dragón o escorpión y rostro humano. Un monstruo de tantos en el campo de la mitología, pero cuya faz resulta loas desconcertante del conjunto. Julián, el protagonista de "Manticora", como diseñador de videojuegos es un creador de este tipo de quimeras, pero, sin que en inicio sepamos que, parece también ocultar algo turbio, casi podríamos decir ...¿monstruoso?. La última película de Carlos Vermut nos cuenta la historia de un hombre que parece haber encontrado una puerta abierta para abandonar su soledad, un viaje en el que el único obstáculo es él mismo.
La relación entre Julián y Diana, una chica que ha conocido a través de una compañera de trabajo,  es el eje en torno el que se va a desarrollar toda la película. Un vínculo que llega poco a poco, entre un solitario más volcado en el trabajo que otra cosa y una mujer cuya gran parte de su existencia gira en torno a su padre dependiente, en el que se va deslizando algún matiz irreal (la visita al Prado, la explicación de cuál consideran el fin de su infancia...), aun con algún detalle que escama (la escena de la salida de la filmoteca) pero que podríamos encuadrar en cualquier película romántica al uso. Pero los últimos minutos de la cinta, de los que poco revelaré para dejar que el espectador los descubra por si mismo, constituyen uno de los desenlaces más perturbadores de los últimos años, en los que mientras la cámara se deleita en un plano fijo su protagonista toma verdadera conciencia de lo que es, llevándole a una drástica decisión.
"Mantícora" es una de esas películas de cuidada factura, con una envidiable fotografía y una sutil pero elaborada dirección artística. Pero sobre todo es una cinta para el debate, una historia que tras pasar de puntillas por temas tan sugerentes como la violencia en los medios audiovisuales o la percepción de la realidad desvela estos son migas de pan, al igual que otros detalles que prácticamente se han deslizado antes nuestros ojos sin dejar poso, que conducen a esa conclusión que constituye un verdadero mazazo que pilla por sorpresa al más curtido. Una cinta de personajes que invita a ser revisada en un segundo visionado...si la impresión causada por el primero lo permite.

*Mantícora" llega a los cines el 9 de diciembre.


domingo, 13 de noviembre de 2022

TERRIFIER 2. ¿Cómo están ustedes? Bien muertos.

 

Sé que llego al humo de las velas porque "Terrifier 2" es una de esas películas de esas que ya se ha escrito largo y tendido, dejando ya poco por decir. Que si más de uno ha vomitado viéndola, que si Stephen King la recomienda, que si la escena de la cama es una salvajada con todas las letras...y no dudo que todas estas afirmaciones son ciertas (respecto a si el señor King ha vomitado al verla es un punto que no puedo confirmar) pero lo cierto es que queda mucho por decir de una cinta para cuyo disfrute no hace falta haber visto la primera parte.
Películas como "The clown", "Stitches" o las dos versiones de "It" ya nos demostraron que más de una vez los payasos, sea uno coulrofóbico o no, no sin de fiar. Pero el caso de Art el payaso (añadida la cuestión de que cuando firma sus crímenes es un guiño a eso de el asesinato como una de las bellas artes) es, literalmente, de traca, siendo un personaje capaz de hacer bromitas tontas con gafas de sol y a continuación mutilar salvajemente al primer incauto que se cruza en su camino. Un ser de tintes sobrenaturales en la mejor línea, salvando las distancias, de nuestro querido Freddy Krueger, solo que lo dice todo sin palabras. De corazón tan oscuro como su traje (debe ser el único payaso del mundo sin una nota de color en su maquillaje y atavío) Art es uno de esos carismáticos psicópatas que nunca sabemos por donde va a salir, que le da una nueva dimensión a eso de "echar sal en la herida", un individuo con el que es imposible empatizar pero que logra sacar el lado más negro de nuestra alma por la vía del humor. Después de todo, es un payaso.
Y ese es el auténtico quid de la película. "Terrifier 2" es, simplemente, una deliciosa gamberrada para paladares muy, muy curtidos. Esta es solo una advertencia que no merece tomarse a la ligera. Una película imposible de tomar en serio (y más si uno quiere disfrutar de ella) que presenta ese tipo de violencia sádica que hace dudar a más de un espectador si apartar la mirada o quedarse embobado con los ojos como platos.
Con un fuerte aroma ochentero y unos elaborados efectos especiales que abandonan el ordenador en pro del maquillaje de toda la vida "Terrifier 2" aboga por una premisa tan sencilla como familiar, presentando la historia de una chica que, tras ver como en los días previos a Halloween varias de las personas de su entorno son brutalmente asesinadas, empieza a sospechar que pueden estar conectadas con ella y que quizás ella sea la única capaz de acabar con esta amenaza que encarna, como el espectador sabe desde el principio, Art el payaso. Pero su buen ritmo y su humor sin concesiones hacen de ella un festival gore totalmente disfrutable y, si el estómago lo permite, de palomitas.
"Terrifier 2" es una película de esas que hace múltiples concesiones en pro del efectismo. Detalles incomprensibles para el espectador amante de CSI (la presencia de lombrices de tierra en cadáveres en descomposición, la resistencia al dolor de la mayor parte de las víctimas o la física de las armas de fuego), pero solo es una muestra más de que es una cinta que está lejos de tomarse en serio a si misma, y eso que sorprende, aunque no se añore, la ausencia casi total de esos matices sexuales explicitos habituales de ese slasher de los 80 que tan bien toma como referencia. Un continuo tren de la bruja que hace realidad esa frase tan popular en el mundo del circo: " más difícil todavía". Y sin duda lo consigue.


"Terrifier 2" tras su paso por festivales llega en breve a plataformas no confirmadas.




miércoles, 2 de noviembre de 2022

AS BESTAS. La debacle homicida de los asuntos eólicos

 

Hasta a aquellos que no estamos muy puestos en eso de las tradiciones rurales y que no solemos pisar el campo ni en vacaciones nos suena la rapa as bestas, la fiesta celebrada en diversos pueblos gallegos en la que se reúne y rapa a los caballos salvajes de la zona, inmovilizándolos entre varias personas a base de pura fuerza bruta. Sin ser un documental sobre está costumbre "As bestas", la última película de Rodrigo Sorogoyen no oculta esta referencia ni en su título ni en sus primeros compases, con una impactante imagen a cámara lenta que va a tener su eco a lo largo del metraje, y no de manera gratuita, en una cinta que en la que es clave el lado salvaje del ser humano.
Ambientada en un pueblo gallego la película nos presenta a un matrimonio francés que decide instalarse en él para vivir de la tierra, pero que va a entrar en conflicto con sus vecinos por la propuesta de una compañía energética de comprar sus terrenos. Con una cuidadísima fotografía, que sabe sacar el mejor partido a unos entornos tan hermosos como sobrecogedores, tanto de día como de noche, y que consiguen prácticamente devorar a los personajes, la película nos crea una falsa sensación de claustrofobia, haciendo que todo el pueblo se convierta en una ratonera. Y los hechos que aquí se van a desarrollar van a constituir una trama que se divide en dos arcos, cada uno protagonizado por un personaje distinto, separados por un terrible suceso que, a pesar de adivinarse durante la primera parte de la película, no merma un ápice su impacto en los protagonistas y el espectador. Sus personajes, encarnados por unos actores que dan el do de pecho con unas interpretaciones viscerales (como ese Luis Zahega que no necesita subir la voz para resultar completamente escalofriante), son los que hacen de esta una película tan desencarnada como realista, logrando crear empatía en más de un momento incluso hacia aquellos que en frío pudieran considerarse los villanos de la función, con esa humanización que hace no haya blanco y negro sino una gama de complejos grises.
"As bestas" es una cinta impactante, tanto por sus imágenes como por sus diálogos. Rodada y montada con eficacia no estamos ante el mero choque repentino y violento entre habitantes de campo y de ciudad que hemos visto en cintas como "Perros de paja" y "Deliverance" sino que las espinas que presenta van mucho más allá. Fluctuando con agilidad entre el thriller, el drama e incluso el terror (la escalofriante escena del bosque no desentonaría en ninguna cinta del ramo) estamos ante una película que evoluciona de manera orgánica, en un clima de constante tensión que se apodera de los personajes y de nosotros mientras nos desarma a fuerza de palabra. Sorogoyen consigue regalarnos una cinta de esas que dejan huella, sin sangre eso sí, con hombres que se comportan como bestias y otros que son tratados como tales, pero eso ante el resultado poco importa.


 "As bestas" llega a la gran pantalla el 11 de noviembre.